Prólogo; Louis

3.6K 237 28
                                    

Far; prólogo; Louis

Louis exhala una bocanada de humo a través de la ventana, y luego la cierra, atrapando el aire caliente del radiador. Apoya la frente en el frío cristal y mira hacia la calle, dejando sus dedos en el radiador para calentarlo.

El agua se derrama en las hojas. Es un rugido sordo en los tejados de los edificios, sin embargo un leve pitido en los oídos de Louis. Hay pequeñas gotas de agua en las verdes plantas del balcón; rosas color rojo pasión cuelgan de sus macetas, haciendo que el suelo se llene de tierra.

Baltimore en invierno es apenas protector; se ve más sucio, más asqueroso de lo que Louis cree que es normalmente. Su departamento es típico de la zona - grande y por debajo de su valor, encajado en un edificio que fue bonito alguna vez. La ciudad es un sueño para los estudiantes de arte que la habitan. Su encanto es a veces descrito como arenoso, y los recién llegados pueden amarlo u odiarlo. Louis está empezando a resentirse, y finge que no sabe por qué.

Son las seis de la tarde/noche, está viendo la televisión y bebiendo mientras teme al horario del día siguiente: 7AM en el McDonald's cerca de su casa, donde trabaja. Vende hamburguesas sobrevaloradas para vivir, durante bastante tiempo. Aunque pueda cenar gratis, su trabajo no tiene nada de encantador.

Louis suspira, apagando el cigarrillo, recordando que la ola de humo definitivamente provocará un enfado en la puerta de al lado. Es una chillona anciana que vive en el departamento siguiente al suyo, que siempre encuentra algo de lo que quejarse, y Louis es uno de sus objetivos favoritos. Se llama Ms. Sullack, y no está seguro de cuál es su primer nombre, pero vive sola y tiene como diez gatos, todos viciosos y fieras.

Apaga la televisión, y levanta sus pies colocándolos en la mesita de la sala. Coge la bolsa de frituras de la mesa y come un puñado de ellas. A pesar de ser las últimas frituras que quedan (sólamente migas afiladas), es su único alivio en este momento.

Es algo solitario vivir en ese departamento. Louis ha estado aquí durante dos años, y todavía no ha encontrado la manera de entretenerse. Su vida los últimos años ha sido un ciclo constante de comer, dormir y trabajar. Y, por supuesto, ocasionalmente reírse de los estúpidos programas de TV de vez en cuando. Cuando no hay nada bueno en televisión, Louis iba a una librería y se sentaba allí durante horas leyendo historias de fantasmas y héroes. Y cuando Louis está realmente aburrido, lee libros sobre jirafas en la sección educativa de la biblioteca (son mucho más interesantes de lo que uno pensaría).

Pero la librería no está abierta después de las 5PM, y el show favorito de Louis acaba de terminar, asi que se sienta en el sofá de nuevo, comiendo los restos de chips que tan sólamente compró ayer.

Suspirando, Louis decide hacer algo más productivo que comer frituras y pasar el tiempo haciendo nada. Se levanta, tira la bolsa (ahora vacía) de frituras a la basura,y se viste con abrigo y chanclas para ir a revisar el correo.

Los buzones están todo el camino hacia abajo, al final del complejo de departamentos, a unas cuantas cuadras, pero a Louis no le importa caminar bajo la lluvia. No es como si tuviera algo mejor que hacer. Se cubre con el gorro de su abrigo, protegiendo su flequillo de la áspera lluvia que cae de las oscuras, retumbantes nubes que se encuentran sobre él, y todo lo que puede hacer es rezar para que no le caiga un rayo encima mientras intenta abrir con su llave el buzón.

Solo tiene tres cosas en la caja, y Louis frunce su ceño al verlo, pero cierra el buzón, y corre de vuelta a su edificio. La lluvia parece morder en su piel, y un escalofrío recorre su cuerpo. Finalmente, respira hondo y entra en el vestíbulo.

"¡LOUIS!" un grito estridente hace temblar al chico. Se gira para mirar a la mujer que tiene detrás, quien se encuentra con sus manos en sus caderas. El largo pelo gris le llega a los codos, y viste con un camisón rosa demasiado grande para su cuerpo, pero esto no parece importarle mientras mira a Louis con una mirada de superioridad.

"¿Si, Ms. Sullack?" Louis fuerza una sonrisa, mientras se acerca lentamente a su puerta.

"Estás empapado, ¿acabas de venir de la lluvia? ¡Estás mojando la alfombra!"

"Tenía que revisar mi correo-"

"¡La alfombra, Louis!" Chilla Ms. Sullack, agitando su dedo índice salvajemente mientras apuntaba al charco que Louis había creado a su alrededor.

"Oh, perdón." Louis avanza hacia la puerta de su departamento a toda prisa, pero Ms. Sullack bloquea la puerta con su pie, y rudamente la abre con un empujón. Se para mientras sus ojos y su nariz arrugada analizan el aire.

"Huelo a humo, ¡¿estabas fumando otra vez, verdad?!" Dice ella, con su voz agrietada. "¿Sabes que en este complejo no está permitido, verdad?" Levanta una ceja, y su boca escupe esa pregunta con furia.

"Bueno, estaba fumando fuera pero-"

"¡Nada de peros! ¡No quiero ese repugnante hedor en mi camino! Si te veo otra vez, ¡Llamaré a la policía!"

"Pero es perfectamente legal, estaba afuera fumando en mi ventana-" Antes de que Louis pueda terminar, Ms. Sullack cierra la puerta furiosamente dejándolo dentro de su departamento, y el chico escucha atentamente los pasos de la mujer por el vestíbulo mientras se aleja.

Louis frunce el ceño cínicamente "¿Desde cuándo se preocupa esta mujer por la alfombra? Jesús."

El joven coge las -ahora mojadas- cartas y las pone sobre la mesa, y se quita sus chanclas y su abrigo mojado. Gira a la derecha por la puerta, y llega a su habitación, donde hay una agradable manta. La pone sobre sus hombros, y se deja caer de nuevo en el sofá, con las piernas cruzadas como indio.

Louis mueve su mano por debajo de la cálida manta, y alcanza el correo, hundiéndose más en el sofá, dispuesto a leer sus cartas.

"Facturas". Louis suspira, lanzando la primera carta de vuelta a la mesa. "Facturas". Louis lanza la segunda. "Y... ¿qué es esto?" Los ojos de Louis forman pequeñas arruguitas de confusión a la vez que mira la letra escrita en el sobre.

Era una carta, dirigida a él específicamente. Es de alguien que él no conoce, pero tiene su nombre y dirección en la parte trasera. En la delantera, está escrita la dirección de Louis y "Louis Tomlinson" con la tinta borrada.

Es de alguien llamado Harry Styles, alguien que vive en Oregón, en el otro extremo del país.

Louis gira y gira la carta en sus manos, pensando que podía haber sido un error, pero tenia su dirección y su nombre escritos, estaba claro que era para él.

Lentamente, el ojiazul pasa uno de sus dedos por debajo del pliegue que cierra la carta, y deja ver un papel que parece haber sido arrancado precipitadamente de un cuaderno. Una áspera escritura ocupa la parte delantera y trasera, y Louis se pregunta si no es demasiado curioso al querer saber lo que un extraño tenga para decirle.

Con un temblor nervioso en sus dedos, Louis aclara su garganta y comienza a leer.

'Querido Louis:'

-x-

hey hey! aquí esta el prólogo de Far, una historia genial que estoy empezando a traducir para que todos puedan leer lo fantástica que es. Una vez más gracias a @evanescently_ por dejar que traduzca su novela.

Comenten, dejen su opinión, eso es importante para mí, y voten!

Far // hs. + lt. - [Traducción]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora