La amiga de Kenma. (Kuroo y tu) |En edición.

Capítulo 28. Explicación.

—Bien.- digo viéndolo fijamente a los ojos— Explícame que pasó con Mika-Chan.

—Oooh mira.- dijo apuntando al gato.— Yuri-kun es tan lindo.- veo como el gato intenta zafarse del agarre del castaño.

—tetsuro.- lo miro mal y él suelta al gato pesadamente.

—A Daishō le gustaba Mika-chan.

—¿chan?- lo interrumpo y el comienza a reír.

—Amo verte celosa, aunque seas aterradora.

—Me preocupa que relación tengas con cualquier cosa relacionada con daishō.- él me mira preocupado,  y yo siento que el corazón de me va a salir en cualquier momento con solo recordarlo.

—Yo quiero saber de daishō.

—Primero hablemos de Mika-chan.

—¿Tu si le puedes decir Chan?

—Habla.

—daishō se le confesó pero ella le dijo que no porque yo le gustaba, y yo solamente quería molestarlo a él así que fui su novio 3 meses, creo.

—¿y que más?

—Él me odia por eso y muchas cosas más.- mi mirada lo pone nerviosa.—No pasó lo que te imaginas.- una parte de mi agradecía eso.
Con cualquiera esos con ella era lo que pedía.
—¿Me vas a hablar de daishō?- asiento con la cabeza.

—Fuimos novios.

—¿y?

—fue antes de nekoma.- ahora es el turno de él de verme seriamente.—Fuimos novios más de un año si no me equivoco.

—¿Pasó?

—no.- digo riendo cosa que se que a él le molesta. —Si tu crees tener mala suerte, lo de él era peor.

—¿Peor?

—Yacha- kun le mordió el dedo gordo del pie.- una sonora carcajada salió de la boca de Kuroo y tomó a mi  gato en sus manos.

—Por alguna extraña razón amo a este gato.

—Kuroo.- digo viéndolo. —Yuri-kun es el gato que tuve después de Yacha-kun.

—No me importa. - dice sonriente.—Creo que le compraré algo a este gato en nombre de tu gato anterior.- después de que Yuri-kun se salio del agarre de Kuroo la conversación volvió. —¿Qué más pasó?

—¿te acuerdas que deje la natación un tiempo?- él asiente.— Digamos que daishō era un poco... posesivo y no me dejaba nadar.

—¿no?

—no.- le confirmo y lo veo fijamente. —Nunca comprendió que esto era lo que me gustaba y que no importara cuantos chicos sin camisa pasarán,  que nunca los iba a ver con otras intenciones.

—Lo único que me molesta a mi es que seas demasiado cariñosa con algunos chicos.- dice viéndome fijamente. —Lo demás,  se que lo tengo mejor que ellos.

—¡KUROO!- grito lanzandole un cojín.

—¿Entonces él era tóxico?

—Mi madre dice que me destruyó. - digo viendolo fijamente. —Pero ella es fiel creyente que tu me has ayudado a volver a la normalidad.

—¡MI SUEGRA ME AMA!- grita mientras me jala para poder besarme.