Algo inesperado

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Narradora:

A la mañana siguiente Emma se despertó por el sonido de su celular, era su mamá quien le estaba hablando en ese momento.

-Hola Mamá- dijo aún adormilada

-Hola hija, ¿cómo estás?- preguntó con entusiasmo.

-Bien mamá, ¿y tú?- dijo sentándose en su cama.

-Bien.- suspiró- Mira hija, tal vez esto sea difícil de decir, pero... voy a estar de viaje un mes más- Emma podía oír que su madre estaba tranquila, pero la realidad era otra, ella estaba muy preocupada por su hija.

-Pero Mamá... ¿por qué haces esto?-preguntó con algo de tristeza.

-Me acaban de llamar, necesitan que haga unos trámites en Los Ángeles, mi jefe me dijo que me tardaría por lo menos un mes en hacer eso- su tono de voz cambió radicalmente a uno triste.

-Bueno, está bien mamá.- no le quedaba de otra que aceptarlo- Por cierto, ¿si me vas a dejar ir al concierto? Es el próximo sábado y sabes que lo he esperado mucho- dijo cambiando radicalmente de tema, no quería seguir hablando de algo que la ponía triste.

-Sí, está bien hija, pero te estaré llamando frecuentemente- dijo con dulzura.

Se despidieron las dos y Emma dejó su teléfono en el buró de noche que tenía al lado de su cama.

*Una semana después *

Pasaron los días y Emma había hecho sus exámenes y había estado platicando con sus amigas sobre el concierto.
Ya era viernes y Emma estaba más que emocionada por ir a ver al gran Justin Bieber.
Había platicado con Iván para ver si las podía llevar al concierto, a lo que él había aceptado.

Primero llegó Iván a la casa de Emma, pero ella todavía no estaba lista.

-Hola Emma- saludó dándole un beso.

-Hola Iván, pasa- se hizo a un lado y dejó que Iván entrara.

-Estás emocionada, ¿verdad?- preguntó riéndose un poco.

-Sí, la verdad sí- dijo con una sonrisa.

Luego de platicar un poco con él, Emma se subió a seguir arreglándose mientras Iván la esperaba en el sofá de la sala.

Emma se había puesto una playera de Justin y unos jeans negros con unos converse morados, se puso lacio el cabello y llevó un suéter por si hacía frío, ya que, el concierto iba a terminar noche.

Bajó y se salieron de su casa, después Emma se subió al carro de Iván mientras pasaban a recoger a Emily y a Ana. Llegaron por ellas y luego de ahí se fueron al concierto (que en carro se tardaban unos treinta minutos en llegar ahí).

Mientras iban en el camino veían varias camionetas y carros con la frase "voy al concierto de JB", "Te amo Justin" y cosas así, eso hacía que se le subieran los nervios a Emma, Ana y Emily.

Llegaron y Emma se despidió de un beso de Iván y ya después él se fue en su carro.

Ahora empezaba lo mejor.

Los Sueños Se Pueden CumplirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora