Iván & Emma

139 8 1
                                    

Narradora:

Llegaron al centro comercial y después se fueron a comprar algo de comer.

Para Emma aún no era creíble que ella estuviera saliendo con Iván, pero era lo único que le hacía feliz en ese momento.

Después de ir a comer algo, anduvieron paseando por el centro comercial, y como típica pareja iban agarrados de la mano.

-¿Sabes? Me la estoy pasando de lo mejor- dijo ella mirando el perfil de él.

-Eso espero, que hoy te olvides de todos los problemas que tienes- sonrió mientras ella iba recargándose en el hombro de él.

-Gracias por estar aquí- sonrió mientras le daba un beso en su mejilla.

Caminaron hasta llegar a una banca que estaba frente a una tienda de mascotas.

De un momento a otro Emma revisó su celular y tenía un mensaje, ¿y adivinen de quién? Sí, de Víctor.

Víctor:Vas a ver que no vas a durar mucho tiempo con él.

Emma: ¿Y cómo estás tan seguro?

Emma no tenía que responderle, pero le entró curiosidad.

Víctor: Yo lo sé y sé que vendrás corriendo a mis brazos.

Emma: En tus sueños, ¿sabes? Ya me harté de ti, déjame en paz de una vez.

Emma apagó su teléfono. No entendía porqué le había dicho eso, que no iba a durar mucho tiempo en su relación con Iván, se le hacía demasiado absurdo, si apenas llevaba un día de relación con su novio.

-Emma, ¿quieres entrar a ver una película?- preguntó mirándola fijamente.

-Claro, pero, ¿cuál?- ella sonrió.

-Se acaba de estrenar una película, es un poco cursi, si quieres podemos entrar a verla- sugirió señalando el cartel de la película.

-Sí... sí- dijo algo nerviosa.

Entraron y compraron unas palomitas grandes y unos refrescos, también algunos dulces.
La película era interesante, pero Emma no era de esas chicas a las que le gustaba las películas cursis, al parecer a Iván sí. Después de la película se fueron al auto e Iván fue a dejar a Emma a su casa porque ya eran las ocho de la noche, eso significaba que ya era tarde.

Él la dejó en la puerta de su casa, tal como lo hacen en las películas.

-Gracias por estar conmigo este día Iván, de verdad, gracias- dijo mirando sus perfectos ojos verdes.

-No agradezcas, soy tu novio y... estoy muy feliz estando contigo- sonrió algo nervioso.

-Está bien, ¿te hablo mañana?- dijo dulcemente.

-Claro- dijo con su sonrisa que nadie le podía quitar.

Se dieron un lindo beso corto e Iván se fue, Emma entró a su casa y se recostó en el sillón de la sala.

Ella estaba muy feliz porque apenas está conociendo a Iván y le parecía muy dulce, pero aún así le faltaba conocerlo más.

Se fue a su cuarto sin cenar nada, ya que, comió mucho estando con Iván.
Se puso su pijama y se acostó rápidamente en su cama.

[...]

Se despertó a las dos de la madrugada porque había tenido una pesadilla no muy agradable (nunca son agradables las pesadillas).

Bajó y se fue directo a la cocina por un vaso con agua, luego de tranquilizarse se volvió a subir a su cuarto, se recostó y se volvió a dormir.

Los Sueños Se Pueden CumplirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora