HE SMELLS LIKE SUNFLOWERS | HaeMark; Omegaverse

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✎𝓝𝓮𝓻𝓿𝓲𝓸𝓼𝓸

—¡Por la gran luna Lee Chenle!

Cayó de espaldas contra la grama, acostado pudo observar la expresión molesta de Hyunmin juzgándolo, sus mejillas tomaron un color rojo intenso, se levantó torpemente temiendo que su Hyung hubiera llamado la atención.

—¡H-Hyung! No tiene por qué ser tan ruidoso.... —sonrió nerviosamente, Hyunmin enarcó una ceja y le pegó en la cabeza. —¡Auch!

—Deja de estar vigilando a Jisung como si fueras un acosador, estás asustando a su hermano —eclamó este señalando al pequeño niño que lo miraba a la lejanía con cara de susto, Chenle se escondió detrás de un arbusto.

—Oh no, no, no ¿Y si le dice a Jisung que estaba mirándolo? ¡Hay que irnos Hyung! —el alfa se arrastró hasta las piernas de Hyunmin y se ancló de ellas, Hyunmin comenzó a patearlo.

—¡Suéltame! ¡Te lo advierto pequeño mocoso! —Chenle sintió su corazón querer salir de su pecho, su Hyung estaba haciendo demasiado ruido, ¿Cómo escaparía? Por la gran luna que Jisung no se entere que...

Oh no.

Un aroma tan sublime, suave y dulce a lirios y jengibre llenó el aire, sus músculos se pusieron temblorosos y trató de distraerse con el aroma de Hyunmin pero una vez que sintió esa suavidad le fue imposible.

Finalmente, cayó otra vez de espaldas contra el césped, esta vez sonriente y ronroneando, ah, pues su lobo se hundía en regocijo cada vez que Jisung estaba cerca.

—¡Chenle Hyung! —abrió los ojos saliendo de su ensoñación, había quedado petrificado, se levantó con nerviosismo y se escondió detrás de Hyunmin.

—H-Hola, eh, t-tenemos que irnos, l-lo lamento —tartamudeó, Jisung sonrió enternecido.

—¡Deja de esconderte detrás de mi, zoquete! —graznó el mayor de todos, Chenle sin embargo, no se movió de atrás de él avergonzado de que Jisung viera lo rojo que estaba.

Entre el forcejeó, las risas de Jisung y los tartamudeos de Chenle, un nuevo aroma a manzanilla los distrajo, un ahorma que hizo a Hyunmin empujar a Chenle y dejarlo expuesto ante la persona que menos quería.

—Hyunmin, dijiste que me ayudarías —Hani ni siquiera se molestó en mirar a los menores.

—¿Es necesario? Tengo cosas mejores que hacer —replicó en un tono cortante, Chenle y Jisung se sorprendieron, Hani era su Noona, ¡Cómo podía!

—Más respeto, y sí, es necesario —amenazó la mayor con una mirada fulminante, Hyunmin resopló. —Adiós Sungie, adiós Lele.

Los dos refunfuñones adolescentes se fueron juntos, Chenle observó a su Hyung y a su Noona pelear incluso a la distancia, esos dos n se llevaban nada bien.

—Creo que se gustan —susurró una cálida voz en su oído.

D e la sorpresa volvió a caer de espaldas al suelo.

Su lobo aulló extasiado pues todo el aire olía a jengibre y lirios, Chenle no pudo evitar ronronear nuevamente, desde que se había presentado como alfa su lobo tomaba más poder que él, más cuando Jisung estaba cerca.

Chenle parpadeó sonrojado mientras se agachaba a su lado.

—H-Hyung, ¿E-Eso fue un ronroneo? —susurró el menor acercándose a su rostro.

—Eh... Y-Yo, eh, ¡M-Me tengo que ir! —exclamó efusivamente levantándose, Jisung lo miró con tristeza.

Chenle huyó de lugar con su corazón doliendo, odiaba sentirse tan tímido, odiaba no poder ser un alfa normal que pudiera acortejar al omega que tanto le gustaba, era tan patético. No merecía a Jisung.

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Este fue el final de la historia, espero que les haya gustado.

¡Muchas gracias por leer!