Semana 2: Estás sin estar.

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Flavio

-Saca tu libreta. -dije yo expectante a lo que compuso Samantha-.

-Oye! ¿De qué vas? ¿Por qué?

-Porque me vas a cantar.

-A sí, já! -negó que le diese a cantar. A Hugo le ha gustado porque me ha escuchado.

-Pues muy bien. Me parece perfecto.

-Sin querer. No se la he enseñado yo, te lo juro.

Eran momentos, en los que dudaba si lo nuestro funcionaba, no entiendo porque tanta desconfianza a que no me enseñé sus canciones, lo respeto, pero dejando de lado eso, creo que no terminamos de complementar, no sé quizá me haga falta tiempo para reflexionar, sobre que quiero. Encima hay personas de por medio.

Hoy con Eva hablé de cine, de cine antiguo, tenemos muchas cosas en común, se me hace interesantísimo hablar con ella, dicen eso de que 'el amor fácil no es el de verdad' claro que no siento amor ni por Samantha ni por Eva, pero si que es verdad que Samantha es una persona muy difícil, y a la que hay que entender, supongo que me entiende más, no sé, ara mismo estoy pensando más en esto que en la propia canción.

A veces, yo mismo pienso que doy una impresión de que me da igual todo, de que no tengo sentimientos, ni dudas, quizá me pueda equivocar, me gustaría a veces que me diese igual todo, la verdad.

Llegó la noche, desde esa primera noche, dormí con Samantha, sin que pasase nada más, pero estábamos hay, o en su cama o en la mía, pero fueron pasando los días, y no tenía esas ganas de abrazarla toda la noche.

-Flavio, ven. -señaló la cama, era ya tarde-.

Me abrazó y no me soltó, en ese momento solo quería decirle una cosa, era esta:

-Oye, Samantha que bueno, que esto que está pasando entre nosotros no es nada serio, y que tampoco hace falta todas las noches estar aquí contigo y así. Que en serio, que todo quiero que sea igual que ahora, pero necesito mi espacio ¿sabes?.

-Vale, Flavio -se separó de mi-. Yo entiendo que quieras tu tiempo, y que esto es un poco raro, entonces a veces puede ser agobiante, pero la verdad, estás sin estar, no sé en qué piensas, te veo preocupado estos días.

Sí, la razón era Eva, no sabía que sentía por cada una, puede ser que lo de Eva fuese amistad, o al contrario había química con las dos, pero no sé de qué tipo.

-Nada, tú no te preocupes Samantha está todo bien, estoy un poco ralla'illo por la canción pero no pasa nada. -le di un beso en la cabeza-.

Ahora mismo, no sabía que pasaría mañana ni pasado, no sabía que pasaría cuando vea a Samantha por la puerta, y a Eva por la puerta, solo pensaría ahora mismo, en dormir, que fue una tarea complicada.

Samantha

Ayer me costó dormir, justo teniendo al culpable al lado mío, todavía durmiendo, conozco muy poco a Flavio, pero supongo que lo que me dijo ayer, era que no, que ya no, y lo malo de está situación es que yo ahora, ya estaba pillada por Flavio, me daba rabia porque nos podríamos haber ahorrado estás dos semanas de estar juntos, y así no me da tiempo a que me empieze a atraer más de lo normal.
Pero por otra parte, entiendo que es un poco raro, porque no somos nada, pero parece que seamos novios desde hace cinco años.

Notó que alguien me empieza acariciar la espalda, esa persona solo tenía un nombre y era Flavio, ¿qué coño? Ayer me deja claro, que no, que no me motive y hoy se le ata acariciándome la cara, al principio simplemente no le miraba y me hacía la enfadada, luego cuando siguió no me pude resistir y le abracé. PRINCIPAL ERROR.

minuto a minuto. | Flavio y SamanthaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora