Epílogo

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La noche era fría, una suave brisa corría por cada rincón de aquella ciudad, obligando a los que en ella habitaban a abrigarse.

Dentro de un café, se encontraba un niño... bueno, ya no era un niño, sino un chico de 13 años; sentado en una de las mesas con la mirada fija en el tenedor que tenía en su mano.

Ciertamente estaba esperando a alguien.

Llevaba 30 minutos allí sentado, sacó su célular de su bolsillo y se fijó en la hora.

7:15 p.m.

Hizó un puchero, para después volver a guardar el aparato en su bolsillo.

-Ugh, ¿Cúando llegará?-bufó, impaciente.

Mientras tanto, corriendo por un callejón se encontraba un joven. Se detuvó frente a la puerta del café, colocando sus manos en sus rodillas y cuando recuperó el aliento, arregló un poco su desordenado cabello y entró.

No sabía si iba a reconocerlo, habían pasado 2 años desde la última vez que lo vió.

-Tal vez se hizó un corte de pelo o una perforación, o quien sabe... hasta se pudó volver travesti.-pensó.

Miró entre las pocas personas que habían en el lugar, y pudó distinguir claramente ese alborotado pelo de palmera.

Sus labios se curvaron en una sonrisa, y caminó hasta allí.

Por su parte, el chico parecía estar en un viaje astral.

-Maldición... la tarea...-recordó de repente.

Sintió como alguien se sentaba enfrente suyo, rápidamente apartó la mirada del ventanal y la fijó en el joven delante de él.

-¿Qué tal, Goten?-saludó con serenidad el mayor.

El menor quedó en shock.

¿Ese era Goten #2?

Su cabello era más largo que antes, había crecido unos centimetros.

Pero apesar de todo esto.

Esa sonrisa amable y divertida nunca abandonaba su rostro, sin importar los años que pasen.

-Hola Goten.-saludó por fin.

Ambos se levantaron de sus asientos, y se aferraron al otro en forma de abrazo.

Luego de unos instantes se separaron y se volvieron a sentar.

-¿Cómo has estado, amiguito?-preguntó el mayor con ánimos.

-Bien, bastante bien. Luego de... lo que paso, estuve recibiendo terapia.-suspiró con una leve sonrisa. -Puedo decirte que ya me siento mucho mejor.-

-Bien por ti, amiguito.-levantó su puño, indicándole al otro que lo chocara y este lo hizó. -Y dime, ¿Qué hiciste con esos que te molestaban?

Era íncreible que después de 2 años aún recordará eso.

-¿Tu que crees?-una sonrisa burlona se formó en el rostro del menor al recordar aquel día que llegó a la escuela completamente furioso, y esos chicos se acercaron a molestarlo.

Básicamente le sirvieron para desquitar toda la ira que había acumulado por años, sumada a la impotencia por la muerte de Goten adulto. El segundo mejor día de su vida.

El joven soltó una carcajada.

-¡Te felicito, amigo!-volvió a reír, pero paró en seco. -Pero... estan vivos, ¿Cierto?-

-Por supuesto, cada vez que me ven huyen como cucarachas.-

Goten #2 soltó otra carcajada más fuerte que la anterior.

Goten, Goten y Goten ┇Dragon ball // [SIN EDITAR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora