20° Maldita Debilidad

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Aquella misma noche nos devolvimos a la ciudad y a pesar de los intentos qué hizo Noah por hablarme, fueron completamente en vano. Al igual, que cada vez en la mansión qué siguió insistiendo. Para mi, el mayor de los Pierce era solo un mueble más en esa maldita casa.

Dos semanas han pasado desde entonces y ha sido un verdadero martirio. Todos giran en torno al embarazo de Nicole y ha pesar de que Noah insiste en buscarme, se que esta feliz por aquel bebé que viene en camino. Se que esa pequeña criatura, no tiene la culpa de los errores que los adultos hagamos; son nuestros problemas y tormentos.

Y se que las ganas de mandarlos a todos al carajos son del hecho de escuchar que están completamente encantados y felices. Todo eso me destroza enormemente y enserio quise creerle a Noah, por un momento, aquel día en la cascada pensé que podríamos ser felices en nuestra burbuja, que algún día solo seríamos él y yo pero como soy tan incrédula, tonta y confiada, volví caer por un Pierce, como si uno no fuera suficiente. Maldita debilidad.

Cada noche me duermo llorando y despierto de la misma forma. Mis ojeras son cada vez más notorias y la falta de apetito también; aunque siempre me dejan la comida en la puerta de la habitación porque no quiero salir de ella. Se que es Noah quien lo hace y eso me duele aún más. Aarón ha dicho que debe ser porque estoy muy estresada con la enfermedad de mamá y preferí no desmentirlo. No quiero sospechas de nada.

Aún que, no he dicho nada al respecto, hay algo que me tiene confundida y se que quizá lo imagino de rencorosa o algo por el estilo, pero Nicole y Jean tienen un romance a escondidas y seria estúpido pensar que solo es besos y abrazos, son personas adultas y con mucha pasión, claramente el sexo es parte de ellos y se que no soy la persona más apropiada para juzgarla, pero algo dentro de mi ser, me hace creer que puede haber una posibilidad de que Noah no sea el padre de ese bebe. Pero eso solo era una suposición, el pelinegro me había confirmado que ellos habían dormido juntos y justo en esos mismas fechas.

Y han sido los desvelos qué me carcomen lamente. Mi ansiedad se ha apoderado por completo de mi. En mi mente solo estan los pensamientos sobre An. En cómo Noah solo jugo conmigo. Quiza fue un accidente este embarazo o estaba planeado, o que simplemente el mayor de los Pierce solo quería quitarse las jodidas ganas conmigo.

Y bajo mis episodios fuertes de llanto y ansiedad las ganas de contarlo todo y poner el duda el padre de ese bebe, me han llevado al colapso, pero he sabido ser más fuerte. No puedo contarlo, no me corresponde, no podría dañar a Noah con una noticia como esa.

Luego de beber encerrada en la habitación pienso que sería una buena idea nadar, aunque la última vez no resultó tan bien. Bajo y entró al comedor lo más sutil posible para no molestar a nadie.

— buenas noches —mi intención de sonreir es un fracaso y mas que eso solo hago una rara mueca al entrar al comedor.

— buenas noches Layla —habla Noah sin dejar de observarme

— ¿cómo esta el bebe? —sueno mas sarcastica de lo que pretedia

— bien, gracias —susurra y desvia la mirada hacia el plato

— venia a decirle que estaba deseosa de nadar, así que cenare mas tarde —miro a Dennis y ella asiente amablemente. Realmente no deseaba estar en esa mesa con ellos, hablando de bebes

— traquila linda, pedire que guarden tu plato

— muchas gracias, Dennis —la primera sonrisa sincera y en agradecimiento se la doy a la madre de los Pierce. Ella es una buena mujer y no merecía nada de esto.

Sangre Infiel (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora