Entro despacio a la habitación y me apoyo en la puerta para echar un vistazo adentro. al percatarme que no hay muros en la costa o más bien dicho no hay "un individuo desagradable a la vista", decido entrar, despacio y en cuclillas para no hacer ruido.
cuando estoy frente al armario, saco mi pijama, y me lo coloco modo flash. mientras estaba agachada tomando la ropa que me había despojado hace poco, siento la puerta cerrarse detrás de mí, haciéndome girar rápidamente del susto.
me quedo unos segundos (los que parecen minutos) observándolo fijamente hasta que él me nota. Aarón estaba saliendo del baño con solo unos bóxer negros puestos; se que estaba mirandolo muy descaradamente, pero no me pueden culpar, cualquier persona en mi caso también lo haría, era demasiado sexy, forjado por los mismos dioses, mil gracias Odín por este placer visual.
Sonrío y niego con la cabeza para sacar cada pensamiento pecaminoso de mí ser; Pierce me observa curioso y se acomoda la ropa interior solamente para molestarme
— ¿disfrutas la vista cariño? —sonríe burlesco, algo muy normal en él
— me encantaría decirte que si, que adoro la vista —finjo tristeza— pero me enseñaron a no mentir —levanto mis hombros— deberías vestirte, para que no des pena, cariño —me volteo para cerrar las puertas del armario
— si crees que doy pena, entonces no te molestará que haga esto
sin dudarlo me toma del brazo y me hace girar para quedar frente a él; retrocedo por la impresión y Aarón aprovecha para acorralarme, colocando sus brazos en el closet para evitar mi escape
— mira Layla, este matrimonio es por conveniencia de nuestros padres, ten lo bien en mente —acerca su rostro hasta quedar a tan solo centímetro del mío
— éste acuerdo tampoco me agrada Aarón pero es lo que tenemos que hacer y vamos a tener que saber ser marido y mujer, ambos somos adultos, al menos yo si —lo miro desafiante y con una mano lo empujó para separarnos pero él ejerce presión y no se mueve ni un centímetro
—claro que soy un jodido adulto preciosa, por lo mismo podemos ser marido y mujer no tengo problema con eso
toma mi mano y la coloca encima de mi cabeza e intento alejarlo con mi otro brazo y hace lo mismo, provocando que no pueda moverme. Pierce con una mano mantiene sujeta mis muñecas apegadas al mueble y con la otra comienza acariciar mi pierna y lentamente sube hasta llegar al borde de mis pechos
— estoy dispuesto a que hagas lo que desees con mi persona y mi tiempo, serán tuyos, pero recuerda, que mi sentimientos jamás lo serán, esto es solo es un trabajo mas para mi
sin dejarme procesar su confesión, me besa el cuello, despacio y tan torturantemente que por unos segundos mi cabeza se va a blanco y lo puedo pensar en nada más que en sus cálidos labios en mi cuello. Y no es que no quisiera separarlo, lo habría echo si no llevara tanto tiempo sin el contacto de un hombre. Su fragancia a menta me llega directo a las fosas nasales cuando su último beso lo deposita en mi barbilla. Pero todo vuelve a ser más claro, cuando Aarón suelta mis brazos y sin esperar lo empujo con todas mis fuerzas lejos de mi. Si me habi dejándo totalmente confundida pero ahora mi razón había vuelto en si.
— no vuelvas a tocarme —lo amenazo y este levanta sus brazos con diversión
— algún día tendré que hacerlo, cariño, tú lo dijiste —sonríe con malicia— somos adultos y seremos marido y mujer, muy pronto
— muérete —lo miró furiosa y le pego una bofetada. él me observa fijo y no puedo diferenciar entre la ira y la diversión en sus ojos— está es la última vez que te lo advierto, no vuelvas a tocarme, mientras no seamos marido y mujer, dormiré en otro lugar —tomo mi pijama que había caído al suelo y salgo de la habitación escuchando la suave risa de Pierce.
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Sangre Infiel (EDITANDO)
RomanceLayla renunció al amor ya que era un privilegio que ella no podía darse. Nunca pensó que con todos los lujos que poseían, debía desistir algo tan personal para ella pero prometió hacer todo por su familia .Así que dejo a un lado su libertad y se ca...