Capitulo 8

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Rocío

Arrugué la foto. Luego la rompí en mil pedazos. No pude evitar llorar, odiaba sentirme así. Odiaba a ver terminado con él.
Por qué?

- Todo bien -dijo Esteban asomando su cabeza detrás de la puerta
- No -dije secándome las lágrimas
- Oh linda, no llores, se me parte el corazón verte así. Contame que ocurre?
- Ocurre que soy una estúpida, me siento fatal y no sé si pueda continuar con esto.
- No digas eso! Vos sos muy fuerte, y con la ayuda de Gastón...
- No lo incluyas, yo no lo necesito.
- Linda, se qué es difícil continuar después de una ruptura, sobre todo porque lo querías pero...
- Basta! No estoy superando nada... Continuas cuando te deshiciste de algo que no querías, pero yo jamás me quise deshacer de él...
- Qué? Espera, yo creí que tú... Entonces, por qué terminaron?
- Por Mariana
- Qué? Por qué? Mariana, la nueva novia de él?
- Sí -dije y cubrí mi rostro con mis manos.

Unos días antes de que termináramos Mariana me vino a buscar a casa.
Yo le abrí la puerta y ella no me sonrió, ni dijo hola.
- Tenemos que hablar -dijo fríamente y con la mirada fija en mí.
- Claro, pasa -dije de la manera más amable.
- Tienes que terminar con Gastón -dijo apenas entro a mi casa.
- Qué? De qué hablas? -dije sin entender nada.

Quién rayos se cree que es?-pensé

- Tienes que hacerlo Rocío
- Qué? No! No voy a terminar con él
- Tienes que hacerlo -repitió ella firmemente.
- No lo voy a hacer, ni pienses...
- Mira -dijo ella interrumpiendo - Esta relación no le conviene.
- Y qué sabes tú lo que le conviene o no a Gastón? -dije cruzando mis brazos
- Se mucho más que tú...
En parte tenía razón. Mariana y él iban a la misma universidad. Ambos estudiaban ingeniería y él siempre me hablaba de lo buen amigos que eran.
Al principio sentí celos pero luego entendí que el sólo la veía como una amiga, pero ella a él no.
Cuando ella me vino con esto pensé inmediatamente que lo decía para que yo le dejará el camino libre.
Eso no lo iba a permitir

- Escucha Rocío, te lo digo por el bien de ambos. Él... Las cosas no andan bien, sabes? Últimamente él a bajado mucho en sus calificaciones. Hace pocos días hable con sus maestros y el decano; ellos me dijeron que si continuaba así perdería la beca. Tú más que nadie debes saber que él la necesita.
- Y qué tengo que ver yo en todo esto? -dije sorprendida. Él no me había hablando sobre eso
- Oh vamos! No nos hagamos las tontas. Tú y yo sabemos que el hombre está loco por ti. Tú eres el motivo de su bajo rendimiento. Tú -dijo señalándome con su dedo índice - eres la más grande distracción que tiene.
No tenía ni idea de lo que ocurría, pero de alguna manera me sentía culpable.
- Sólo piénsalo, pero si de verdad lo amas y quieres que su vida no se eche a perder, déjalo. Tu y yo sabemos que él no tiene dinero para la universidad y que esto sería fatal para él. Se ha esforzado mucho y no me parece justo que todo se vaya a la basura. Tu que dices? Es justo?
- No -dije sacudiendo la cabeza
- Que bueno que sepas entender, nos vemos pronto.
Ella se fue.

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