CAPITULO 4.8

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- ¡Feliz cumpleaños! -Sarah dijo, mientras Julián le tendía el obsequio a Alessia. Se encontraban en una de las habitaciones los tres solos pues habían aprovechado el momento, un corto tiempo para entregarle el obsequio a Alessia, Julián no quería darle el presente frente a docenas de personas.

-. No es un apartamento. -bromeo Julián cuando Alessia tomó el pequeño estuche rectangular de terciopelo. -. Así que no te hagas ilusiones.

-. No tenían que molestarse. -Alessia los abrazó antes de abrir el estuche.

-. ¡Es hermosa! -sonrió la chica mientras la pulsera reposaba entre sus dedos. Julián soltó el aire que contenía en sus pulmones cuando vio que la sonrisa no era falsa, era real y auténtica.

-. Ta daaaaa! -Sarah alzó su muñeca mostrando su pulsera, idéntica a la que sostenía Alessia. Ésta parpadeó intentando entender por qué Sarah tenía una igual.

-. No son las únicas. -Julián informó mostrando la suya. Luego tomó la pulsera dorada de la mano de Alessia y comenzó a colocarla en su muñeca.

-. Es un pequeño obsequio para que nos recuerdes. - Julián la observo y vio a la chica concentrada viendo las tres figurillas juntas en forma de aves con las alas extendidas como si se alzasen en vuelo. - ¿No te gusta?

Alessia negó con la cabeza-. Me encanta. -luego abrazó a ambos y pidió el significado de las tres figurillas.

- ¿Recuerdas la noche que nos conocimos? -preguntó Julián. Alessia asintió, tomando la muñeca de la chica con una mano y con la otra señalando la figurilla en forma de puño continuó. -. Representa cuándo y cómo nos conocimos. Este... -dijo señalando una figurilla musical. -...el día que bailamos con tu madre y esta... -la figurilla con las tres pequeñas aves. -...son tú, Sarah y yo. Para que no te olvides de nosotros.

-. Oh vamos, no llores que si lo haces Julián lo hará. -dijo Sarah limpiándole a la chica una lágrima que se le había escapado.

-. Habla por ti. -se defendió Julián. Y luego se abrazaron, salieron de la habitación y volvieron al patio trasero de la mansión Deveraux.

La tarde se hizo corta, disfrutaron y se divirtieron durante el postre del hermoso pastel. Comenzaba anochecer y los invitados comenzaban a marcharse, los adolescentes se quedaban en espera del afterparty mientras sus padres se marchaban. Julián, Sarah y Alessia junto a las cinco amigas de esta comenzaban a preparar todo para la noche. El Dj arribó cuando oscureció y casi todo estaba montado, Julián habló con Jean y Geneviève afirmando que él se encargaría de cuidar de Alessia y de la casa, en compañía de Dorothée y con gran sorpresa Cédric, éste a último momento afirmo que se quedaría. La pareja mayor se marchó diciendo que la noche la pasarían junto a unos amigos.

-. No se preocupen, todo estará en orden cuando vuelvan. -Julián los vio irse en el coche y luego se volvió hacia Sarah, Alessia y sus secuaces. -. Que todas las habitaciones principales estén cerradas con llaves. Que las bebidas estén afuera, que no haya nada dentro que los parranderos quieran. - la música comenzó a sonar y se escuchó al grupo de adolescentes gritar. Julián vio a las chicas dirigirse a las habitaciones.

-. Permiso. -un chico con barba y un estilo hípster apareció detrás de él.

- ¿Qué es eso? -Julián preguntó viendo el barril en una carretilla.

-. Cerveza... Para la fiesta.

-. Yo no pedí cerveza. -Julián se llevó la mano a su frente y suspiró, no era posible que ya empezara a salírsele de las manos. Ya tenía un pequeño barril no necesitaba otro del doble de tamaño. Luego un chico apareció con unas cajas de cervezas sobre su pecho.

- ¿Tú quién eres?

-. El chico de las cervezas. -respondió sin detenerse yendo a la parte trasera de la mansión.

-. Es Marco. -respondió el chico hípster. -nos llamaron pidiendo cerveza.

- ¿Quién lo hizo?

-. Ammm... Jonah.

- ¿Quién diablos es Jonah?

-¡Antoane! -un chico rubio apareció de la nada. -amigo, ¿es de la mejor?

-. ¿Te he fallado alguna vez? -. El chico hípster le sonrío y luego vio a Julián. -. Él es Jonah, soy Antoane ¿tú eres...?

-. Julián. -. Gruñó sabiendo que solo arruinaría la fiesta si no dejaba pasar el alcohol, total una fiesta sin alcohol no sería nada para los adolescentes presentes.

-. Llevaré esto. -Jonah tomó la carretilla con el barril y antes de marcharse vio a su amigo. -te quedaras, ¿no?

-. Creo que sí. -Jonah se marchó desapareciendo rumbo al patio.

-. Te he visto antes. -dijo Antoane.

-. No lo creo. -Julián cerró la puerta principal y se volvió al hombre de barba larga que le daba compañía en ese momento.

-. No bebes alcohol. -Julián se dio cuenta que no era una pregunta, lo vio tratando de descifrar como sabía que él no bebía alcohol. -. Eres Julián....

-. Te lo acabo de decir.

-. No, Julián, tú fuiste a un bar gay hace unos días... -. El hombre le sonreía y se acercó un poco. -. Soy el bar tender, ¿no me recuerdas?

-. Creo que lo estoy haciendo. -dijo mientras pensaba la primera noche que salió, fue la noche que se había ido junto a Ryan.

<<. Ryan. >> Pensó se recordó llamarlo, si es que aún tenía la tarjeta del atractivo rubio de cabellera larga.

- ¿Y bien? -preguntó Antoane extendiendo los brazos.

-. Ah, sí. Si, ya te recuerdo. - dijo pensando en la bebida dulce que le había dado aquella noche.

-. ¿Eres pariente de los Deveraux?

Julián negó mientras se dirigía a la cocina con el hombre de barba delgado detrás de él. -. Solo soy un amigo. -tomó un bote con agua del inmenso refrigerador. -. La cerveza esta fuera. -. Continúo tendiendo un bote con agua a Antoane.

-. De acuerdo. Más saludable. -Antoane tomó la botella de plástico y bebió de ella. - ¿Cómo te ha tratado París?

-. Bien. -

-. Oh vamos, ¿solo bien? París es por todo mejor que solo un "bien".

Julián rio -. Asombroso, excelente... increíble. ¿Contento?

Julián pudo notar la cercanía estrechándose entre ambos cuando Antoane se le acercó. Pudo ver al hombre <<. Estos franceses son unos calenturientos. >> Julián pensó.

-. ¿Vienes? -Julián supo que esa simple pregunta implicaba más de lo debido, caminó junto al hombre, pero lo dejo marcharse solo cuando se excusó que debía hacer algo más.  

Sin Mucha LenguaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora