Cuando el primer amor termina.

Adiós, Querida.

Caminar.. Es lo único que hago desde que ya no estas aquí.. Este invierno parece que nunca acaba.

Aún me cuestionó porque desde que te fuiste, mis días son fríos y sin propósito.

Extraño tu bello cabello celeste bajo la luz de la luna, bajo la lluvia y ahora la nieve.

Tus ojos encantadores y ni hablar de tus bellos labios, nuestro último beso tenía el sabor de una lagrima.

No dejaba de pensar en ti, mientras el viento rozaba mis mejillas, solté aliento en mis manos y las frote, la ciudad estaba iluminada, como si fuera por arte de magia y los árboles brillan en las desnudas calles.

Todo mientras mis sentimientos caen pedazo por pedazo, esto es lo que decidí, hundirme en mi tristeza extrañándote.

No te veo desde hace un año, y tal vez ya no que recuerdes, Sona.

Pero no te puedo olvidar, te mantienes aquí desde el invierno pasado, ¿cuánto tiempo tiene que pasar para poder olvidar ese horrible invierno?

Llegue a la estación de tren, donde me diste un triste adiós.

Recuerdo perfectamente.. Como entrabas al tren, viendo nuevos horizontes y despidiendo nuestro amor con un bello: "Adiós y Gracias."

Mientras mantenía una sonrisa para intentar no llorar por tu partida, solo terminó peor yo no quería dejarte ir, pues estaba seguro de que estaba dejando ir mi otra mitad.

Mientras el tren avanzaba lento, tu me mirabas desde tu asiento en la ventana, Moviendo tu mano.

Yo caminaba para verte por la ventana por última vez, no supe en qué momento mi caminar se transformó en un correr.

Ese día corrí tras de ti, como si eso cambiará algo, con la poca esperanza de que te quedaras aquí.

Saben.. Suena egoísta.. Pero cuando tu primer amor te deja, es algo que te duele por mucho tiempo.. Nunca espere que pasara un año.

Ahora.. Solo llevo tu recuerdo conmigo, el roce de tus manos, tu silencio era mi una cura contra el mal día.

Pero al final.. Te deje libre.. Porque si el corazón deja de amar.. ¿De qué sirve?.

Mientras regresaba de la tienda donde siempre íbamos con una bolsa de papel en los brazos, recordaba esos momentos, donde tu tenias lo mejor de mi.

Llegué al departamento, Alune estaba agotada por las horas extras, así que decidí preparar algo de cenar.

Los huevos con arroz eran nuestros favoritos, Alune adoraba tenerte aquí todo el tiempo.

No entiendo porque tuviste que irte..

Alune se levantó de la cama y entró a la cocina.

- Aphelios.. ¿A dónde fuiste?

Me quedé en silencio, después de que serví el arroz de Alune, la mire y le di una sonrisa.

- Nada.. Solo fui a comprar algo de despensa.. El invierno se acerca y no me gusta salir en invierno..

Alune me devolvió la sonrisa y empezó a comer, se notaba exhausta.

Lave los platos, el sartén y los palitos, guarde lo que quedó y me encerré en mi habitación..

¿Cuanto tiempo tiene que pasar para que salgas de mi cabeza?

Te extraño.. Y cuando digo esto te extraño mas.

El tiempo es cruel, y yo solo quiero tomar tu mano para poner fin a este frío invierno.

Si yo fuera como la nieve volando podría encontraré más rápido..

- ¡Hola! Esta es la nueva historia basada en varias cosas en las que estoy pasando, quizás esto solo sea producto de un berrinche, pero si les gusta, quizás.. Siga escribiendo y darle un final feliz a esto.

Gracias por tomarte el tiempo de leer esto.

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