Favorito.

133 13 6
                                    

Desperté en una oscuridad inmensa, tenía mi boca y ojos vendados, estaba atado a una silla y por alguna razón estaba frío y mojado en todo el cuerpo.

- ¡Despierta! - fue lo único que escuché aparte de agua saliendo de la llave - ¡Rápido!

Me quitaron la cuerda de la boca y respiraba agitado, lo normal sería tener miedo.. Pero tal vez es lo que todo este tiempo quería, una muerte a manos de otra persona y que no me tengan que recordar como un cobarde que se suicidó.

No tenía nada que perder.. Solo esperar una bala en la cabeza, cuchillos en el estómago, que me cortaran la lengua y seguramente abandonar mi cuerpo en la basura..

Me quitaron el vendaje de los ojos, eran dos personas mirándome fijamente, eran personas comunes.. Secuestradores promedio, no me impresiona ya.

Estaba muy agotado.. Solo quería dormir, pero cada vez que bajaba mi cabeza para dormir, sacaban una manguera y me salpicaban de agua helada, esto me provocó ardor en mis manos, mejillas y brazos.

Jadeaba y salía aliento frío de mi boca, mi mente estaba en blanco y solo veía como hablaban entre ellos, yo estaba lo suficientemente cansado como para no entender nada de lo que decían.

Reaccione sólo cuando me tomaron del rostro y me acerco a su cara con brusquedad - Escucha niño... Me costó una fortuna encontrarte, pero al final me dará mucho por ti - decía entre carcajadas y una sonrisa socarrona -

Yo levante una ceja y lo mire sin expresión - No lo entiendo.. No se que te dijeron de mi, pero te aseguro que no soy alguien acaudalado.. Así que ni tengo nada que ofrecer. - conteste sin ningún tono ni expresión, solo de cansancio y derrota -

- ¿No lo entiendes? No es por dinero ni familia - me soltó el rostro y jalo una silla para sentarse frente a mi - están en busca de sirvientes, pero no cualquiera, uno que sea "multiuso" y que no hable.. Claro, reclutamos a varias y varios.. Pero tu eres el favorito del jefe.. Y pagará una fortuna por ti.

Me quedé perplejo.. Esperando lo peor.. Para mi, servir a un corrupto, asesino u mafioso, era peor que morir abandonado en un callejón.

De pronto, me volvieron a tapar los ojos, me pusieron un collar y unas esposas en las muñecas, me jalaban fuerte con unas cadenas, lo que antes era tranquilidad, ahora era desesperación - ¡Déjenme ir por favor! ¡Se los ruego! ¡Quiero irme a casa! - me lanzaron a un cuarto frío.. No escuchaba nada..

Me acosté en el suelo.. No quería ser vendido por quizás una miserable cantidad y después ser desechado como la mitad de personas que son vendidas todos los días..

Pasaron segundos, minutos y horas.. Hasta que escuche entrar a alguien, yo rápidamente me levante asustado de ahí y retrocedí hasta chocar con un muro en mi espalda.

Escuche una voz gruesa.. No podía reconocerla del todo pero me intentaba tranquilizar - Tranquilo pequeño.. Pronto estarás en casa.. - acaricio mis cabellos mojados y rozó sus dedos en mi mejilla, bajo hasta mi mano y me levanto - Lamento si mis muchachos te trataron de manera cruel.. Por desgracia, todavía no me puedo mostrar ante tus bellos ojos..

Sentí como me guió a una pequeña mesa, me arrodilló en una almohada y se puso atrás de mi, destapando la cinta de mis ojos, no mire hacia atrás, suponía que este fue el tipo que me "compró" pero era extraño, yo pensé que sería más.. Cruel o inhumano.

Posó sus manos en mis hombros y enfrente de mi, tenía unas hojas, un lápiz y un borrador, en el momento que lo vi, rápidamente me explico - Escucha.. Te eh estado viendo desde hace mucho tiempo.. Y veo lo difícil que es tu vida, pronto te llevaré a otro lugar, no quiero que seas un esclavo.. Pero todavía es muy pronto para explicarte, hasta entonces.. Puedes despedirte haciendo una carta..

Cuando el primer amor termina. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora