Matrimonio arreglado (Parte 1)

De vuelta a Seúl

La luna de miel había llegado a su fin, después de días en que disfrutaron juntas con una taeyeon más dedicada aunque siendo un poco distante y fría aun, y una Tiffany alegre y amorosa.

A esta hora ya estaban en sus respectivos asientos en el avión, seria un viaje corto.

-tae? Estas bien?- la rubia miraba a su esposa que se veía un poco ofuscada.

En los días posteriores taeyeon había sido una persona dedicada, de alguna forma Tiffany ya estaba aprendiendo sobre sus cambios de humor constantes y sabía en qué momentos debía callarse o tomar distancia, también cuando debía aprovechar el momento para darle todo el cariño que desbordaba de su corazón. En el poco tiempo que llevaban juntas y con la luna de miel la pelinegra comenzó a gustarle mucho más a la rubia, no sabía porque, solo estaba pasando, aveces quería tan solo estar alrededor de ella todo el tiempo, otros se sentía desganada y quería llamar la atención de su esposa solamente, era como si taeyeon hubiese llegado a su vida y simplemente se hubiese apoderado de todo lo que era su persona, sobre todo de su corazón que la llamaba a su lado cada día.

-no pasa nada Tiffany-  desde que estuvieron juntas otra vez taeyeon comenzó a llamarla por su nombre y para la rubia eso fue un gran paso, al menos no le decía hwang, solo lo hacía cuando estaba molesta. Aparte del apodo cariñoso que le había puesto, ese solo lo decía en momentos especiales.

-esta bien- lo mejor era no insistir, la rubia sabia que algo pasaba pero no podía hacer mucho, taeyeon era muy cerrada con ella aún.

El silencio se apoderó del lugar y ambas se acomodaron para dar comienzo al viaje de vuelta a casa, lo más probable era que las cosas de Tiffany ya estuvieran en la mansión Kim. La rubia solo esperaba que vivir en ese lugar no fuera un tormento como era vivir con boa.

Un par de horas después ya estaban de vuelta e iban directo a la mansión, el silencio aún reinaba entre ambas, Tiffany solo estaba dándole tiempo a taeyeon para que se le pasara su molestia, después de eso la pelinegra le iba a hablar como si nada hubiese pasado. Esa era taeyeon, una persona bastante complicada.

-Tiffany, se que ahora tienes una amistad con Jessica. Solo espero que no me metas en medio, nuestra relación ya no es la misma- la rubia miraba atenta a la pelinegra y solto un suspiro, de eso se trataba todo, de Jessica.

-no te preocupes, no volveré a entrometerme entre ustedes. Ya me quedo claro una primera vez- de tan solo recordar que por todo eso taeyeon había desaparecido, a la rubia se le estrujo el corazón.

-solo consultame cualquier cosa que sea relacionada con ella. Será lo mejor para evitar mal entendidos- la pelinegra miraba a la rubia con seriedad mientras que Tiffany la miraba con cierta tristeza mientras asentía.

-asi sera- la rubia se giró para mirar por la ventana, mientras que taeyeon al notar el semblante triste de Tiffany se acerco tomando su mano.

Aunque taeyeon aún no se abría del todo con tiffany le gustaba que ella fuera alguien alegre, eso le llenaba el corazón, para ella estaba claro que quería a la rubia, aunque le costaba estar a su lado y acostumbrarse a vivir con alguien a su alrededor, la espontaneidad y el buen entendimiento de su esposa eran brillantes, no quería causarle ninguna tristeza, aún tenían mucho camino por recorrer juntas y este era solo el principio.

-phany- la pelinegra susurró cerca de su esposa y extendió su mano para apoyarla en la mejilla ajena haciéndola girar para que la mirara -sonrie para mi- la rubia le sonrió apenas la escuchó, este era el momento de aprovechar a taeyeon.