Todas las bodas son hermosas, no es que en mi vida haya ido a muchas, en realidad esta es la segunda a la que voy y no me esta decepcionado... si no fuera por la novia histérica, o la versión histérica de Opal.
El vestido blanco revolotea de un lado a otro mientras Opal camina por la habitación de la novia, de retuerce las manos nerviosa, para Opal eso es un ataque de histeria.
Thalia entra a la habitación con su vestido de dama de honor, caminando como si estuviera en una pasarela, lo cual no dudo que haya estado alguna vez, ella es diseñadora, el vestido que ahora luce Opal fue diseñado por Thalia y en realidad tiene mucho talento.
-Tranquilízate nena que todo está perfecto, los invitados ya están en sus lugares, los anillos están seguros, el novio esta perfectamente vestido, pero...
-¿Pero? ¿Qué pasa con Tahiel? - la voz de Opal solo sube unos tonos alarmada.
-Nada, solo que esta igual o más nervioso que tu, cree que te iras -todas las damas de honor en la habitación rodamos los ojos - creo que nunca va ha superar lo que pasó en la secundaria.
Después de seis años de amistad con Opal recientemente descubrí toda su historia con Tahiel, y para que negarlo, el era un idiota total cuando se conocieron, si bien ahora es señor frio, antes era gasolina pura que se prendía ante la menor chispa y al parecer ella era un fósforo en plena combustión cuando se trataba de él, hubo lo de siempre, peleas a más no poder, Tahiel actuando como un idiota que te hacía odiarlo y mientras más nos contaba nos hacia apreciarlo un poquito para luego arruinarlo otra vez. Pero supongo que funcionan a su manera.
Yo sinceramente no me hubiera quedado con el después de todo lo que me contó Opal...
Pero quienes somos para juzgar.
Además no puedo negar de que él cambio, no fue el mejor cambio, pero insisto, si Tahiel hace feliz a mi amiga, les doy mi bendición.
Opal se tranquiliza un poco mientras todos afuera toman asiento en sus respectivos lugares, la boda es al aire libre, justo al atardecer y todo esta estrictamente cronometrado para que la ceremonia sea en el momento del atardecer, pero hay una carpa enorme para la fiesta posterior, por que la casa que tienen los padres del novio es obscenamente grande y tiene un jardín hermoso y descomunal en donde estamos celebrando la boda.
Camino por el pasillo acompañada de él hermano del novio, es un hombre increíblemente alto, me saca más de una cabeza y en este momento yo llevo tacones de diez centímetros, y aunque físicamente no se parece nada a Tahiel, ambos son igual de idílicamente guapos. Solo que el no es un cubito de hielo, pero tampoco es una persona juguetona.
Al llegar al altar el me da una reverencia antes de besar delicadamente mi mano y ambos nos dirigimos a nuestros respectivos lugares, espero a que todos entren, el novio ya esta en el altar y desde mi lugar veo la fina capa de sudor que se le forma en su frente mientras el tiempo transcurre, pero sólo eso es la prueba de los nervios que siente, por lo demás tiene un gesto imperturbable, lleno de frialdad, sin ningún atisbo de alegría, pero todo eso cambia cuando ella entra, vestida de blanco, con la sonrisa más grande que alguna ves he visto en el rostro de Opal, su cabello castaño en un elaborado recogido, la música suena suave mientras ella camina con la elegancia de un cisne.
Hermosa, ella está simplemente hermosa.
Y el hielo en los ojos y estoy segura que también en el corazón de Tahiel se derrite solo un poco y esboza una sonrisa de costado, un hoyuelo en su mejilla.
El padre de Opal la entrega a Tahiel.
-Cuídala que es uno de mis mayores tesoros - dice el señor mientras coloca con cuidado la mano de mi amiga sobre la palma de Tahiel.
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Estrella Fugaz
Novela JuvenilBastian Black, es el sueño húmedo de cualquier adolescente... Y hablo en serio cuando digo "cualquier". No puedo culpar las, si solo con verlo se te detiene la respiración y solo con escuchar su voz tienes un orgasmo. Pero con los años yo desarrolle...