VIII - Un nuevo Zar - Parte 1

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TRANSCRIPCIÓN DE LAS REUNIONES DE JULIO DE 2018

SEDE DEL GOBIERNO DE LA FEDERACIÓN RUSA

15/07/2018

PARTICIPANTES: Aleksei Ibramovich (A.I), presidente del la Federación de Rusia; Pavel R.Grishen (P.R.G), director del Servicio de Inteligencia Exterior, SVR; Teniente General de Aviación Nicolai Belaiev (N.B), comandante de la Fuerza Aérea; Coronel General Dmitry Kolesov (D.K), comandante del Vigésimo Ejército de la Guardia. También estuvo presente el ministro de Defensa, Iván Cherensky (I.C).

Este documento es la versión autorizada por el Ministerio de Relaciones Exteriores de la Federación Rusa. Ciertas partes de la transcripción original se han eliminado. Las observaciones del anotador, no identificado, se encuentran entre paréntesis. El comienzo de la reunión ha sido suprimido.

P.R.G- ¿De qué estamos hablando, Señor Presidente?

A.I- Saltémonos el ceremonial, Pavel Romanovich. Y pongamos las cartas sobre la mesa. Cuando formamos este comité sabíamos que tendríamos que tratar un montón de asuntos a la luz de la nueva estrategia de «contención activa». Y este es uno de particular importancia. 

(Revisa una carpeta forrada en cuero, con el logo en heráldica del SVR en la tapa; la primera hoja del informe reza «Secreto»)

«A pesar de los esfuerzos de nuestra industria de defensa por ser autosuficiente, en algunos sistemas asociados a nuestras armas dependemos completamente de fuentes del extranjero, siendo este hecho conocido tanto dentro de nuestra Inteligencia Militar como de la foránea. A la tecnología nacional todavía le cuesta seguir el tren de ciertos desarrollos occidentales, y no podemos dejar que esa brecha se acentúe. Como se recordará, la bancarrota de la Unión Soviética fue causada en parte por una brecha tecnológica similar, brecha que terminó haciéndose insalvable»

(Se aclara la garganta y sigue leyendo) 

«Francia es actualmente nuestro colaborador principal en tecnología de armamento, junto con Italia. 

Si bien los contratiempos surgidos durante la fabricación conjunta de los buques clase Mistral han podido ser solucionados, en otros ámbitos los resultados no han sido tan halagüeños. Concretamente, en estos ítems dependemos casi exclusivamente de la industria francesa: cámaras infrarrojas FLIR para nuestros vehículos blindados y para los pods de bombardeo usados en nuestros aviones de ataque. Lentes de visión nocturna para nuestros pilotos y para nuestras tropas. Asimismo, el sistema IRST furtivo, que equipa la última versión del caza avanzado Su-41, utiliza sensores térmicos franceses marca Tales»

(Levanta la vista) 

Podría seguir, pero esto es lo principal. Necesitamos esos componentes como si fueran agua, si queremos que nos sigan tomando en serio como potencia. Pero si somos consecuentes con la doctrina que tan brillantemente ha trazado Feduikov, es muy probable que Francia abandone nuestros tratos comerciales...y con ellos cualquier venta o cesión de tecnología avanzada. Y eso es una amenaza grave no sólo para nuestra industria nacional de armamento, sino para las Fuerzas Armadas y para las arcas del Estado. Que es como decir para el Estado mismo. ¿Ahora, cómo podemos superar esta situación? 

(Intervienen los comandantes Kolesov y Belaiev)

D.K- Pero...Señor presidente, según tengo entendido... ¿No se están produciendo en Rusia sensores de la marca Tales, en un acuerdo conjunto? ¿No tenemos ya la tecnología? No soy abogado, pero... ¿No podríamos alegar incumplimientos de contrato y seguir produciendo esos sensores como si nada?

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