This is the story of the emotions (High School DxD x Lector Masculino)

Capitulo XII

[Opening I]

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—Necesito ser más fuerte, (N/Hyodo).

—Todos necesitamos ser más fuerte, Issei.

—No hablo de eso, sino que necesito ser más fuerte físicamente.

—Lo sé. Pero apuesto que soné como alguien sabio.

—Maldición (N/Hyodo), no estoy bromeando. Necesito tu ayuda.

—Lo entiendo. Sin embargo, ¿por qué yo? No es como si fuera el más capacitado para entrenarte.

—No puedo pedirle ayuda a alguien más, después de los problemas que he causado.

—¿Qué tipo de problemas?

Issei le contó el problema sobre querer llevarse con una monja, algo que (N/Hyodo) ya sabe, superficialmente, pero lo sabe gracias a Akeno. Lo que si no sabía es el problema que tuvo ayer en la noche en donde fue atacado y lastimado, no de gravedad, en la casa a la cual iba para hacer un contrato por un exorcista. Y que luego fue salvado por una monja que es Asia, ya que esta detuvo al exorcista el tiempo suficiente para que llegará Rias Gremory y se lo llevará para curarlo.

—No quiero estar dependiendo de ellos, y de seguro tienen cosa más importante por hacer.

—"Lo más seguro es que lo ayudarían sin problemas, pero él se dará cuenta con el paso del tiempo" —pensó (N/Hyodo) —...Está bien, te ayudare. Eso sí, no esperes gran cosa de mí.

—No hay problema, siempre que demos lo mejor de nosotros —comentó Issei mientras le daba un pulgar arriba

—Está bien. Mañana a las ochos de la mañana — dijo para ponerse de pie— "Al parecer no voy a dormir lo que se debe" —fue lo que pensó (N/Hyodo) para luego agarrar una mochila e irse del cuarto para dirigirse al comedor, no sin antes desearle buenas noches a su primo

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En este nuevo día tanto Issei como (N/Hyodo) se levantaron al mismo tiempo, y es que debido a lo de ayer en la noche, después de dos semanas y media, al fin pusieron un despertador, que si bien para uno de ellos es de mal gusto, al final no importaba ya que lo que cuenta es que cumpliera su misión de levantarlos para cumplir lo que dijeron en la noche. O bueno, eso es lo que supuestamente piensa uno, ya que el otro sin perder el tiempo le mostro lo contrario.

—En serio, prefiero levantarme en la madrugada y quedarme despierto para luego despertarte a la hora acordada, o no dormir antes de oír esa alarma de nuevo.

—¿Pero qué tiene de malo la alarma que puse, (N/Hyodo)? —Puso la alarma de nuevo.

¡Es hora de despertarse dormilón!, ya es hora de que dejes la cama. ¡Es hora de despertarse!, y si no lo haces, iré yo a hacerlo, y no será por medio de toques o empujones, y tampoco diré lo que te haré ya que los sabes muy bien~.

La alarma estuvo así, repitiendo lo anterior dicho por un minuto más, y cada vez que lo repetía, el sonido se hacía más fuerte hasta el punto que de ves de levantarte con una determinación de iniciar el día de buena manera, te daría ganas de levantarte para ir a una iglesia y exorcizar el despertador, porque ese sonido que se producía por el aumento de volumen no es normal; y también te daría ganas de exorcizarte por si acaso entro un ente maligno a tu cuerpo.