CAPÍTULO XII

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         Sentado en la moqueta de su camarote con las piernas entrelazadas , Luke Skywalker busca atravesar el velo oscuro que nubla su visión en la Fuerza . A su lado , en una pared , está  su viejo droide astromecanico R2-D2 en modo inactivo , para recargar su energía .
         < Alguien tan poderoso como lo fue el Emperador , está usando el Lado Oscuro . ¿ Acaso Palpatine tenía otro aprendiz , aparte  de mí padre ? >
         Después del ataque a Bespin por parte de piratas contratados por los discípulos de Ragnos , Luke Skywalker decidió volver al planeta Korriban . Ya había estado en Korriban ,  cuando fue junto a la doctora Aphra y sus amigos Han Solo y Chewbacca en busca del tesoro perdido del Conde Dooku . Pero está vez fue en busca de respuestas .
         Lo que había encontrado fue restos y huellas de un combate en el que se vieron implicados los imperiales . Cadáveres devorados por las alimañas del desierto , pertenecientes  a soldados de asalto e inquisidores .
          No le quedaba duda de que los discípulos de Ragnos y los imperiales se habían enfrentado , pero el motivo le era desconocido. Luke intuía que allí  , en El Valle de los Señores Oscuros se había producido un hecho transcendental para el devenir de la galaxia , pero desconocía cual era . Se hallaba ante un callejón sin salida .
         Otra perturbación en la Fuerza la había sentido hace unos días . Luego le llega la noticia de una batalla estelar en la órbita de Corellia , entre imperiales que terminó de forma abrupta con la llegada de un súper destructor estelar con un súper cañón láser , y que destruyó dos destructores estelares imperiales y un acorazado estelar .
         Aunque el Servicio de Inteligencia de la Nueva República necesitaba tiempo para confirmar la existencia del súper destructor ,  Luke Skywalker supo que era verdad y no una exageración propia de la propaganda imperial . El ser poderoso en el Lado  Oscuro se había hecho sentir y el miedo se empezaba a extender por la galaxia .
        < Solo puedo esperar a que aparezca de nuevo y golpee >
         La puerta de su camarote se abre y en la entrada aparece un sonriente Lando Calrissian con un uniforme de comandante de la Armada Imperial .

        - Estamos a una hora de llegar al planeta Carida . Y traigo nuevas y buenas noticias . Ackbar y Han tomaron el planeta Emperatriz Teta o Connor si se prefiere . El Moff Panaka y el general Russ cayeron prisioneros , con lo que se puede tachar dos facciones imperiales de la lista .
Y se descubrió un centro de clonación creado por el general Russ .

         - ¿ El uniforme es necesario ?- le pregunta Luke Skywalker .

         - Me temo que sí . El Moff Ulim Nasiel  no puede permitirse que sus hombres sepan que se ha aliado con la Nueva República para poder vencer a las fuerzas  imperiales de el Moff Ram Qayun .
Es por eso que vamos a bordo de un destructor estelar de clase imperial II .

         - ¿ Confias en él ?

         - Ni por un segundo Luke . Se que en el momento en  que venza y ocupe Carida , se volverá contra nosotros . ¡ Tranquilo , tengo un plan ! ¡ Oh vamos ! ¡ Te he traído buenas noticias y tienes una cara de funeral !

         - Me preocupa ese súper destructor con ese súper cañón láser . De algún modo , percibo que Los Discípulos de Ragnos están metidos en ello - admite Luke Skywalker .
        
         -  ¿ Que quieres que te diga Luke ? No entiendo cómo funciona la Fuerza . Ojalá pudiera ayudarte más - le dice Lando .

         - Bueno . Vamos al puente - Luke se levanta y posa su mano biónica en la cúpula de R2-D2 . Este sale de su inactividad , activando su receptor óptico .

           ☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆

        Nada más sale el destructor estelar rebautizado Libertad , del hiperespacio , Luke Skywalker y Lando Calrissian se encuentran con que la batalla estelar entre las facciones imperiales está en pleno auge .
        Cerca de ese caos destructivo se encuentra la esfera verde  del planeta Carida , sede de la famosa Academia Imperial de Carida , y  uno de los mundos más fortificados de las colonias .

EL RESURGIR  DEL SITH  - Escrito por Jesús Quintela Navazo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora