Sin darse cuenta, habían comenzado a bailar un vals que no existía hasta esa noche; su orquesta fue el viento pasando entre los árboles, los grillos en el río, el agua cayendo con delicadeza y el tic tac del reloj, todo pasando bajo la luz de la luna, que les daba la iluminación justa para mirarse la una a la otra. Una pequeña campana marcó las doce de la noche, dando fin al improvisado vaivén de la pareja. La bióloga marina sonrió. No pensó que durarían hasta esa hora despiertas, pero tenían libre la semana, podían tomarse ese gusto. Ya habían pasado cinco años desde que habían comenzado a vivir juntas, y la peliazulada no pensaba que podía ser más feliz, hasta que decidieron adoptar a una linda y simpática niña llamada Ai. La familia con la que tanto había soñado ahora era realidad, y ese día, que cumplían el tercer año de su matrimonio, junto al primero con su hija, deseaba expresarle a la mujer frente a ella, todo su agradecimiento.
— Oye...— susurró en su oído.
— Dime...
— Feliz aniversario— Kanan metió su mano en la sudadera que llevaba y levantó ante la mirada de Mari un collar. Era sencillo, un zircón le daba el toque final, y la rubia supo inmediatamente por qué había elegido ese regalo; la peliazulada siempre le había dicho que sus ojos brillaban como esas piedras preciosas.
— Oh, Kanan— le sonrió —. Es hermoso... muchas gracias— Mari levantó una mano para mirar mejor los detalles en la plata, las marcas parecían estrellas alrededor del zircón —. ¿Me lo pones?
— Ya vamos a dormir.
— Es tu culpa por dármelo ahora— la rubia le mostró la lengua y se dio la vuelta, levantando su cabello.
Kanan procedió con una sonrisa en el rostro. Pasaran los años que pasaran, su esposa era igual de divertida y ocurrente, aunque tal vez un poco descuidada, tendría que recordarle que se quitara el collar cuando se fueran a dormir.
— Es precioso— Mari levantó su smartphone, mirando en la cámara su imagen, a lado de su pareja.
— Como tú— Kanan volvió a abrazarla.
— Es obvio que yo soy más bella, pero te tomo el cumplido— aventó el móvil al sillón y se volvió a la peliazulada, uniendo sus labios con delicadeza—. Gracias— dijo, rozando tiernamente sus narices.
— A ti— la mano de Kanan subió a su cabeza, envolviéndola en sus brazos con adoración—. En serio que no sé qué hubiera sido de mí, con todo este amor que siento por ti, si no hubieras sido tan paciente conmigo— aun después de todos esos años, el corazón de la bióloga continuaba apretándose cada vez que pensaba en cuan necia había sido en su adolescencia. La cálida brisa, que pasaba a través de las grandes ventanas del balcón, le hizo saber que estaba llorando.
— Hey... Gran parte lo hiciste tú— Mari se separó y tomó el rostro de su esposa entre sus manos, limpiando las lágrimas que habían caído por sus mejillas —. Me fuiste a buscar a Estados Unidos casi medio año después de que me fui, no llevabas el dinero suficiente para sustentar tu viaje — dejó salir una risa delicada — Ni siquiera sabías si estaba viviendo en los dormitorios de la universidad o fuera de ellos, no conocías la zona y apenas sabías decir "buenos días" en inglés, ¿quién hace eso?
— Dia me había dado la dirección, y no podía echar por la borda que todas me ayudaran a juntar el dinero para ir allá— Kanan rememoró su hazaña con gracia. Sí que la juventud era algo serio.
— Te fuiste antes de que siquiera pudieran completar para el vuelo de vuelta, en serio que lo pienso y me sigo molestando contigo.
— ¿Vas a lanzarme tu violín a la cabeza de nuevo?
— No tientes a tu suerte, estoy a diez pasos de mi estudio— Mari entrecerró los ojos.
— Ya... pero en serio... gracias por no rendirte conmigo... Y gracias por toda la felicidad que me has dado— Kanan tomó las manos de su esposa y dejó un cariñoso beso en ambas —. Te amo, Mari Ohara.
Las lágrimas también habían comenzado a salir de los ojos de la rubia, quien besó con emoción a la mujer de ojos color violeta.
— Te amo, Kanan Matsuura— imitó, ganándose una sonrisa de su pareja.
Volvieron a abrazarse para continuar con el vals improvisado que les ofrecía la noche. Bajo la luz de la luna, desearon estar juntas por siempre.
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KananMari ABC
FanfictionPor cada letra del abecedario un pequeño (o un gran) drabble con mi otp de Love Live: Sunshine!! ¡Por supuesto que estoy hablando del KananMari! 🐬✨