Aparecen giros inesperados en la vida de Iván, un joven escritor muy famoso y talentoso. Él recuerda mucho su estadía en la universidad y fue entonces dónde se enamoró de Jéssica, la profesora más joven de su facultad. Años después se reencuentra y...
-¿Te vas tan rápido?.-dice Leandro. -Vine para firmar algo.-dije. -¿El domingo qué llevo?-dice Leandro caminando hacia mí. -Filete.-dije rápidamente.-pero de las buenas. -¿Jake te dijo eso?-dice LEANDRO. -Sabes que le encanta la carne.-dije riendo.
Salí de la editorial y algunos transeuntes me reconocian. Es ahí que me di cuenta que era famoso, nunca había recibido tantas miradas en mi vida. Al principio intimidan pero luego lo sentí muy bien.
Entré al mall que estaba cerca de la editorial, pero por la puerta principal. Era totalmente diferente ingresar por ese lado, el centro comercial era hermoso y no me había dado cuenta.
En las tardes los lugares estaban infectados de colegiales y hoy no era la excepción, el centro comercial tenía a un gran número de alegres colegiales y yo solo sonreía.
Entré a mi tienda favorita y caminé por la sección de mujeres.
-¿La señorita Cox está en Recursos Humanos?-dijo una chica. -Hoy tuvieron una serie de evaluación.-dijo otra.
Logré escuchar una conversación de 2 empleadas de la tienda, pero me detuve en el apellido "COX", me resultaba familiar, pero solo reía por pensar en esa persona.
Luego me tropiezo con la señorita que siempre me topaba cuando me encontraba con Rafael. Ella derrama café en mi camisa, tenía una mancha en mi camisa blanca y automáticamente me pidió disculpas. Yo trataba de asimilar la situación tranquilamente cuando unos pasos de tacones altos se aproximaban. -¿Qué pasó?-dice una voz familiar. -Señorita Cox.-dice la mujer de traje negro.-tuve un pequeño accidente, pero no se preocupe yo... -No es nada.-dije volteando hacia Jéssica.
Al momento de verla, sentimientos extraños aparecieron, haciendo que mi cuerpo sostuviera mi alma con todas sus fuerzas para que no se escapara, pero en esas últimas lineas mi voz se entrecortó. Pero mi cabeza me decía que tuviera el coraje de manejar de todas formas la situación.
-I...ván.-dice Jéssica titubiando.
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-"Entonces si era la Cox que conozco".-pensé al sonreirle.
