Aparecen giros inesperados en la vida de Iván, un joven escritor muy famoso y talentoso. Él recuerda mucho su estadía en la universidad y fue entonces dónde se enamoró de Jéssica, la profesora más joven de su facultad. Años después se reencuentra y...
Después de terminar con unos arreglos musicales, abandoné el estudio y decidí manejar hacía la casa de mi padre. Resulta que el verdadero individuo que quería verme, era mi querido hermano Federico, que en realidad es mi recarnación, lo digo por que a esa edad aún no estaba interesado en las chicas, pues era abrumador hablar con una. Aunque no puedo cantar victoria, tal vez incluso se desenvuelve más que yo en clase.
-Hola Kiara.-dije al bajar del auto. -Pensé que vendrías más tarde.-dice ella regando el jardín. -Quise sorprenderlos.-dije sonriendo.
Al entrar a casa sentí una vibra extraña, entonces decidí buscar a Federico y cuando vi que estaba ausente, me dirigí al mío. Sí, a mi antiguo cuarto, que era inluso más grande que el de mi hermano.
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-Solo siéntate.-dijo Federico. -¿Ahora que pasa? -¿Cómo así tuviste una cena con Rafa?-dice Fede sosteniendo su celular. -Larga historia, espera.-dije rápidamente.-¿Cómo conoces a... ? -Es mi compañero de clase hace años.-dijo Fede guardando su celular. -No sabían que eran amigos.-dije. -Recién estamos entablando nuestra amistad.-dijo acomodándose en el sillón rojo. -¿No dices que son compañeros de años?-dije riendo. -Sí, pero nunca nos hemos juntado para un trabajo y menos conversado fuera de clase. -¿Él sabe que eres mi hermano?-dije algo curioso. -No, pero en cualquier momento se dará cuenta, por que ahora que padre se irá de viaje con Kiara, tú estarás acargo de mí. -¿Espera qué?
Mi padre llega del trabajo y nosotros fuimos llamados por Kiara, ella era nuestra madrastra y la verdad es que nunca tuve alguna pelea con ella, simplemente me fui alejando del hogar, por que me resultaba incómodo convivir con una mujer joven. Por otro lado, para Federico era un reto, al principio era delicado con el tema, pero al crecer se dio cuenta que no era gran cosa.
-¿Me explicarás?-dije mirando a mi padre. -No creo que mueras al cuidar de tu hermano.-dice Edgar. -Padre, a mi edad yo me cuidaba solo.-dije orgulloso. -Pero tenías alguien a cargo.-dice Edgar.
Finalmente accedí y después de años, estuve a cargo de mi hermano. Pasaron los días y mi padre bien alegre y feliz de la vida se va con su prometida de viaje, mientras yo estoy al cuidado de mi hermano Fede.
-¿Entonces te quedarás en casa?-dice Federico mirando mi maleta.
-Traje lo necesario y estaré visitando el estudio.-dije algo molesto. -Iván hoy vendrá Rafa, así que prepárate.-dice Federico. -¿y justo ahora lo invitas?-dije molesto. -Es por la feria de ciencia.-dice Federico con un rostro estasiado. -Entiendo.-dije riendo. -Ah cierto, tendrás que hacerle compañía a su madre.-dice Federico.-ella nos preparará el almuerzo hoy. -¿Acaso le contaste que padre se fue?.-dije. -Pensé que ibas a estar feliz, ya sabes, no tendrás que cocinar.-dice FEDERICO algo burlesco.
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"¿Cómo le digo que ella aún me pone nervioso?" "¿acaso la situación se puede poner mal?"
De pronto suena el timbre y Federico ordena la sala. -Creo que ya llegaron.-dice Federico. "y la situación se puso aún peor" me fui corriendo hacia mi cuarto y dejé a Federico solo en la sala. -Oye pero te tengo que presentar.-DICE FEDERICO GRITANDO. -Lo haré a mi manera y no me nombres.-dije subiendo las escaleras.
