Capítulo 17

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Mi cabeza en este momento era un completo desastre, como un huracán que arrasa con todo a su paso.
Por un lado Damián con quien había iniciado una amistad inusual debido a nuestras circunstancias se convirtió en una persona importante en mi vida, no sólo era mi vecino también un buen amigo con el cual podía contar sin mencionar que termine teniendo sexo con él pero por el otro lado también estaba Marcus, mi amigo de la infancia, la persona quien a pesar de todas mis torpezas seguía a mi lado apoyándome sin mencionar que también terminé teniendo sexo con él.
¿Que demonios me pasaba?
Me sentía como una zorra, ¿como fue que terminando me acostando con dos chicos con los cuales no tengo una relación formal?
Me estoy volviendo loca, esto no es bueno para mi de hecho no debería ser sano para nadie, no se como a algunas personas no les molesta para nada.
Necesito ayuda pero si le cuento esto a Karol me asesinara.

—Hey Ari.

—No fue mi intención — dije casi en un grito cuando Karol apareció frente a mi.

—Oye chica tranquila, se que te gusta mantener todo en orden durante las bodas pero no solo eres la organizadora aquí, también eres una invitada y debes disfrutar de la fiesta.

Dijo mientras bailaba en su lugar, me tomo por los hombros para encaminarse a mi lado.

—Tan solo disfruta de todo esto, la fiesta se pondrá intensa, sin mencionar que te tengo una excelente noticia que me acaba de llegar.

—¿Que clase de noticia?

—Ya lo veras, no quiero arruinar tu sorpresa.

Mencionó mientras me hacía tomar asiento en una de las filas asignada a la familia de la novia. Solté un largo suspiro mientras esperaba el comienzo de la recepción de la boda, escuche como hubo música presente y todos giraron cuando el novio se hizo presente tras llegar al altar a los pocos minutos la novia se hizo presente, yo mire a aquella mujer que con una gran sonrisa se acercó al novio y aquello solo me hizo preguntar si algún día yo podría sonreír con esa emoción, no estaba segura de poder llegar hasta esas altura.
Recorde como en una ocasión Damián me comentó que la razón por la cual seguía soltero es que no quería estar atado a alguien, no le gustaba la palabra de tener que formalizar con más razón el matrimonio tampoco era una opción por otro lado Marcus estaba casado con su trabajo así que sin importar a cual de los dos prefiera sabía que no iba a conseguir nada de ninguno de los dos al menos no lo que yo deseaba así que sabía que no hacía falta que me preocupara tanto, estaba segura que era la única con una crisis existencial por lo que pasó ese día, para ellos solo una noche y nada más, la verdad es que aquello solo me estristecío.
Mire al frente cuando escuche las risas de varias personas todos miraban a la persona que había llegado tarde y ahora se colocaba a un costado del novio, su mirada se cruzó con la mía y también le sonreí cuando él lo hizo, le devolví el saludo con un sentimiento un tanto amargo, sabía que no sería sencillo estar compartiendo el mismo espacio con mi primer y gran amor, Kent Smith.

Al final todo fue un gran éxito, los votos fueron hermosos y ahora la gente se acercaba para dar las más sinceras felicitaciones a los novios, mire a Karol quien estaba acompañada por su esposo e hija quienes negaban seguramente por sus palabras tan directas, yo solo reí por debajo mientras los miraba.

—Arianwen Xique.

—Kent Smith —le dije mientras giraba a verlo.

—Siempre es un placer verte.

—Puedo decir lo mismo de ti—mencione sincera antes de mirar los alrededores —¿Donde esta April

—¿No lo sabes? A estas alturas pensé que Karol ya te había contado a detalle, nosotros nos divorciados el año pasado.

—¿Que? Pero ustedes dos...

—Si, fue un completo caos, nuestras diferencias fueron más grandes de lo esperado pero en fin por todo lo ocurrido me motive para abri...

—Eso es grandioso.

—¿Que? —preguntó confuso.

—Digo es terrible, totalmente terrible. Lamento lo que sucedió.
Claro lo del divorcio fue horrible pero felicitaciones por tu nuevo negocio.

—Gracias, ¿y dime como estas tú?

—Excelente.

—Me alegro mucho, se que tu negocio está triunfando es algo de lo cual Karol siempre me mantiene al tanto.

Ambos miramos en su dirección ella seguía riendo a carcajadas junto con el novio.

—Tu hermana en verdad es la mejor.

—No le des todo el crédito a ella, tu también eres grandiosa.

—¿Realmente lo crees así?

—Por supuesto, entonces, ¿nos vamos a sentar juntos?

—¿Sentarnos juntos?

—Si, Karol dijo que ella mismo puso el orden de las mesa. Mencionó algo sobre que sólo los solteros deben estar juntos, ya sabes como a ella le encanta hacer este tipo de bromas.

Mire a Karol quien me guiño el ojo, no sabía si odiara o amarla pero sabía que todo esto había sido a propósito pero aún así me deje llevar por el día de hoy.
Ambos nos dirigimos al salón de fiesta para buscar nuestra mesa asignada, lo confieso aún me sentía avergonzada al estar a su lado y me sonrojada con facilidad debido a sus halagos.
Kent fue mi primer amor, de hecho fue la primera y hasta ahora la última persona con la cual me enamore de verdad pero nunca tuve el valor de confesarlo, yo siempre e sido un completo desastre y me apenaba mostrarle ese lado de mi pero a veces me preguntaba como hubiera sido todo si fuese valiente, si tan solo le hubiera dicho mis sentimientos desde un principio me preguntaba si algo al final cambiaría.

—Debes estar bromeando.

—Es enserio, la verdad es que todo fue un completo desastre incluso esa anciana me terminó noqueando con su bolso debido al mal entendido.

—Estoy seguro que si competimos acerca de desastre me llevare el premio mayor.

—No eres un desastre.

—Me gustaría creer eso. Pero la verdad es que arruinó todo a mi paso.

—No digas eso, puede que seas un poco distraída es decir todos en algún momento lo somos, ¿pero que es la vida sin algo de desastre?

—Tal vez algo de paz.

—Pues prefiero que mi vida sea un completo desastre, después de todo fue así como te conocí.

Dijo con una enorme sonrisa mientras me miraba, aquello me hizo sentir apenada pero aún así sonreí también pues algo dentro de mi aun latía con fuerza por él y me conmovió el hecho de que recordara nuestro primer encuentro. Era nueva escuela y como entrada triunfante derribe al equipo competo de deportistas mientras que a su paso también arruine el uniforme de los jugadores todos estaban furiosos pero la única persona que me tendió la mano ese día fue Kent, él no dejaba de reír mientras que su uniforme era un completo caos debido a la pintura blanca aún así siempre me sonrió y me alegraba que lo siguiera haciendo.

—Y dime, ¿aún eres buena bailarina?

—Nunca e sido una buena bailarina y lo sabes.

—Pará mí eres grandiosa.
Anda vamos.

—No creo bebí mucho solo estaré tropezando por ahí.

—Entonces yo te sostendre.

Dijo tomando mis manos para llevarme a la pista para bailar, al principio fue algo sencillo un simple movimiento de un lado a otro pero conforme avanzaba la noche todo fue cambiando...

Y todo se fue al carajos cuando lo termine besando.

Simplemente no aprendo la lección.

¿Aceptas Este Amor? Si... No... ¿Tal Vez? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora