Capítulo 19

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—¡Arriba Arianwen Xique! —escuche aquel fuerte grito que me sorprendió pero antes de poder siquiera moverme sentí como me lanzó fuera de la cama.

—¿Que te sucede Karol?

—Más bien, ¿que te sucede a ti? Un día simplemente decidiste llamar a la oficina diciendo que te darías unas breves vacaciones mientras que la oficina esta a cargo de un evento en verdad importante.

—Necesitaba aclarar mi mente.

—¿En tu habitación? Cuando uno dice que irá de vacaciones por lo menos va a la playa no a encerrarse en su habitación. Se supone que son vacaciones no una cuarentena.

—De acuerdo necesitaba algo de descanso.

—Si, si, como sea. Levanta tu trasero y vamos a ponernos en marcha, tenemos muchas cosas que hacer.

—¿Realmente no me vas a tener algo de piedad?

—Ya te tuve una semana de piedad, cruce mis propios límites. No pidas más, ahora toma una ducha, te ves horrible.

Karol salió de mi habitación y yo solo solté un largo suspiro pues sabía que no podía seguir evitando a todo el mundo para siempre. Ya había sido lo suficiente cobarde como para ocultarme por una semana entera en mi departamento tenía que salir y enfrentar las propias consecuencias de mis actos o al manos intentarlo.
Fui al baño para tomar una ducha, admito que durante mi encierro me descuide un poco ya que lo único que hacía era comer y dormir así que no me sorprendería ni un poco el hecho de haber engordado un poco, salí del baño para ir a vestirme podía percibir el olor de la cocina de Karol, lo cual me hizo sentir un leve mareo, creo que había abusado de la comida durante esta semana, una vez que salí que me vestí fui a la cocina pero me detuve al ver varias bolsas en la cocina pero en especial una blanca que capto mi atención.

—¿Que es esto?

—No entres en pánico, no es para mí es para mi hermana, al parecer tiene la sospecha de estar embarazada. Últimamente tiene mucho cansancio, hambre y algo de náuseas matutinas.

Mencionó mientras me miraba, yo observe la prueba de embarazo mientras a mi mente venía los recuerdos de mi constante cansancio durante esta semana al igual que la hambre insaciable y las náuseas que tenía en la mañana pensando que eran provocadas por... ¡OH DIOS! Espera un momento Arianwen, vamos trata de recordar con un poco de calma, cuando fue con Damián creo que fui cuidadosa, haber navega por tus recuerdos, nosotros, nosotros... No... ¡MALDICIÓN! Y después de eso con Marcus, nosotros dos, él no en ese momento y entonces yo no, ¡DOBLE MALDICIÓN! Pero haber tranquila con Kent, ¡ni siquiera recuerdo una mierda!
¡TRIPLE MALDICIÓN!
Solté un gran grito que sobresalto a Karol, ella me miro preocupada mientras yo lanzaba la prueba de embarazo lejos, tomé mi bolso y corrí fuera de mi departamento, necesito verificarlo, es tan solo una sospecha no creo que sea enserio. ¡A quien engaño! Esto me pasa por dejarme llevar por la vida de una mala mujer con deseos de lujuria, estoy acabada.
Salí del edificio corriendo para subir a mi auto para conducir en dirección a la farmacia más cercana, mis manos me su daban mis piernas temblaban pero en especial la sangre me hervía debido a la vergüenza.

—Prueba de embarazo, ahora —le exigí a la joven quien se encontraba detrás del mostrador ella retrocedió un par de pasos para darme la caja, pague el precio de esta para tomarla pensé en volver a casa pero si lo hacía y Karol seguía ahí iba a matarme —¿Donde hay un baño que pueda usar?

La joven me señaló una puerta a la cual entre de inmediato, jamás pensé hacer este tipo de cosas, bueno si pero no este tipo de circunstancias me imaginaba mi prueba de embarazo de una manera más diferente o al menos el hacerla con una emoción porque tendría un bebé con la persona que amo pero ahora no tengo ni la mas mínima idea de quien es el padre.
Me siento horrible.

¿Aceptas Este Amor? Si... No... ¿Tal Vez? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora