"Doncel contra Corcel"

Capítulo 11: Quizás no tengas otro remedio

11-Quizás no tengas otro remedio

**Grimmjow**

-Ah! Arf!!! Grr!!! ¡Ah!! ¡Mm!!!- jadeo y gruño sin parar mientras mi culo se siente lleno cada vez que esa enorme polla entra en mi agujero profundamente llevándome al borde del colapso. Muerdo la almohada hasta que me pongo a cuatro patas en la cama sintiendo el bombeo de la polla del hombre que está de rodillas tras de mí, gruñendo ronco mientras el sudor perla el vello de su piel y su largo cabello negro en suspensión en el aire.

Justo en mitad de lo mejor, suena su teléfono móvil y él mira de reojo deteniendo sus embestidas con su polla bien profunda en mi interior. Yo intento coger aire por la caña que me está dando, pero a los pocos minutos vuelvo a sentir el deseo de ser penetrado salvajemente y ahora su polla se limita sólo a bombear entre las paredes de mi ano sin moverse, lo cual es un martirio.

-Sí, sí, me encargaré de la transacción después, no lo he olvidado- escucho su voz mientras habla por teléfono y yo intento mover mi cadera buscando atención a lo que él responde saliendo de mi interior sorprendiéndome cuando se incorpora de la cama para seguir hablando paseándose por la habitación. Yo le miro jodidamente caliente y cabreado por haberme dejado al límite del orgasmo y él me mira con malicia siguiendo a lo suyo.

-Luego te llamaré cuando esté todo listo. Ahora estoy algo ocupado- cuando por fin cuelga el puto móvil, le abro las piernas mostrándome ante él y sin retirar mi ansiosa mirada de su polla aún dura y tiesa como un mástil listo para llegar al final.

-Arf...cabrón...no cortes en lo mejor ¿de qué coño vas? -

-Tengo negocios importantes que atender, Grimmjow- sonrío cuando viene de nuevo a la cama y me agarra de una pierna para ponerla sobre su hombro, metiéndome su gran polla en el culo de nuevo en la posición de tijera. Yo aúllo de placer casi y cierro los ojos degustando la deliciosa sensación de la follada. –No puedo hablar de forma intimidante con mi polla en tu culo. Perdería respeto-

-Ah...jaja, respeto...ah...ah...yo no tengo de eso...por eso me la suda tu posición...-

-Ya veo- abro los ojos dando un alarido de rabia cuando el desgraciado vuelve a dejarme sin su polla y se corre sobre mi pecho e incluso salpicando mi cara alzando la barbilla con prepotencia. Después suelta mi pierna dejándome tirado en la cama y toma asiento tras ponerse una bata frente a su mesa para encender el ordenador. Yo gruño frustrado y me levanto de la cama para empezar a vestirme cuando oigo su autoritaria voz.

-Sólo tenía que mandar un correo- observo como echa la silla atrás y se abre la bata para que vea su enorme polla aún medio rígida. Me relamo los labios mientras voy hacia él y me siento a horcajadas esperando a que él mismo me meta la polla dejándome caer sobre él. Echo la cabeza hacia atrás jadeando de puro placer y siento como me agarra por la nuca para besarme con tanto salvajismo que empiezo a moverme yo mismo sobre sus caderas para disfrutar de otra gran follada. Cuando nuestras bocas se separan, me relamo los restos de saliva y me apoyo en sus muslos para alzar mi cadera y bajarla sin parar, gimiendo con los ojos cerrados mientras él me contempla y acaricia mis pezones.

-Eres hermoso, Grimmjow.... –

-Ah...ah...joder...que bueno...ah...-

-Te gusta que te folle ¿cierto? - abro los ojos mirándole desafiante ante esa pregunta.

-Ah...de que si no estaría aquí...ah...tu polla es enorme...mmm...la más grande que he tenido nunca en el culo...-

-Y que puede hacer muchos milagros- le frunzo el ceño cuando acaricia mi abdomen hasta bajar hasta mi propia polla dura que ni siquiera tengo que tocarla de lo viciado y excitado que tengo el ano. –Mueve tu cadera más, Grimmjow...haz que te llene bien...- ¡¡arggh! ¡Joder! Debería odiarle por cada orden, pero mi cadera se mueve sola en círculos mientras me agarro a sus hombros para no desequilibrarme y él me ayuda a girarla, delante y atrás, haciendo que no pueda aguantar más cuando me corro apretándole y él gime de placer besándome hambriento mientras mis gritos mueren entre nuestras bocas y más cuando empieza a expulsar varias tandas de semen dentro de mí mareándome de placer.