^Alejandro^
—No lo llames.
—¿Qué?— dijo saliendo de su transe.— ¿a quién?
—No te hagas. Sabes perfectamente quién. No, puedes ser débil, le dejarás claro que te puede y eso no lo quieres.— y me senté a su lado.
—Eres como el amigo Gay que no tengo.— y lo abrazé
— emmmm....¿Gracias?— y nos empezamos a reír.
—¿De qué me perdí?— dijo Yayo entrando a la habitación.
—De nada.— dije
—Bueno. _____ ¿nos vamos?— dijo
—Sipi.
Los acompañe hasta la puerta.
—Bueno. Este es el adiós.— le dije y la volví a abrazar.— que te vaya de lo mejor en España, tal vez te voy a visitar.
—Genial.— dijo recibiendo mi abrazo.— hasta entonces.
—Hasta entonces.
^Pepe^
Después de qué ____ se largó, no pude evitar sentir coraje y romper algunas cosas de mi habitación. Mi Tía subió enojada por el desastre y me hizo salir de la casa a tomar aire fresco. Pero no salí a tomar aire fresco, salí a tomar, literal, a tomar.
"No veo un nosotros en el futuro."
Eso y una mierda. Por mi se puede ir a la verga, ella y todos los demás.
Recibí un mensaje de Alejandro diciéndome sobre una Puta fiesta para despedirla y no se que mamadas más y eso le respondí que se fueran a la verga. Me contestó igual. Que se joda. Tomaba Tequila como si no hubiera un mañana. Lo malo es que si lo había, después del 6to shot de tequila, 3 de mezcal, y no se cuantas cervezas decidí regresar a casa. Tome un taxi, llegue y me senté en una de las sillas de afuera. Estaba pensando. En realidad. Carajo, había sido algo duro con ___, pero que coño, ella técnicamente estaba "rompiendo" conmigo, ¿cómo querían que me pusiera? No todo es mi culpa .
*No todo es tu culpa, pero la cagaste diciendo tanta pendejada*
La voz de la razón ha hablado.
*Sabes que la cagaste, pero tu maldito orgullo de macho alfa no te deja verlo*
Bueno, creo que mi conciencia, pueda tener un poco de razón.
Mi celular empezó a vibrar, lo saque y en la pantalla brillaba Strappy, contesté:
—¿Bueno?— le dije.
—Mira pendejo, su vuelo sale en putos 15 minutos, ve y despídete de ella tan si quiera, no seas cabron.— y me colgó
Me fijé en el reloj exactamente eran las 5:45 de la mañana, me paré de la silla y fui corriendo a la avenida, no pasaba ningún taxi vacío, de mi casa el aeropuerto estaba a 20 minutos, si me iba corriendo no llegaba, por fin paré un taxi.
—Al aeropuerto, se puede pasar todos los rojos que quiera, pero tenemos que llegar antes de las 6.
—Como ordene.— dijo el señor.
^____^
Eran las 5:55, y Yayo y yo nos abrazábamos.
—Que te vaya bien hermana, esperaré con ansias tu regreso— dijo logrando que se me soltaran algunas lágrimas— no llores pequeñaja, sabes que seguiremos en contacto.
—Pero no será lo mismo.
*Los pasajeros con destino a España, favor de abordar el avión*
—Bueno es hora de que, subas abordo. — dijo separándose de mi.
