Capitulo 21

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Celeste Pov:
"Arándanos y limón"

Abro los ojos, despertando de mi sueño.
Miró al lado de mi cama y está vacío.

Fue solamente un sueño...

Para asegurarme miro a mi alrededor, no está su ropa, no hay ningún rastro de que él estuviera aquí.

Solté aire aliviada.

Me siento mejor en la cama, pongo mis pies en el suelo y apoyo mis codos en mis piernas para después pasar mis manos por mi cara.

Volteo hacia la ventana y el sol recién empieza a brillar; deben ser las 6:30 de la mañana tal vez.

Pero entonces algo llama mi atención.
Debajo de la ventana, donde hay una mesita de noche que siempre tiene una pequeña lámpara y un vaso de agua; ya no está el vaso de agua y en su lugar hay un papel doblado.

Lo tomo con rapidez y lo abro para leer lo que lleva.

"Sabes que odio las despedidas"

Es lo único que dice la nota.

Suspiro, la dejo en su lugar inicial y me paro de mi cama para dirigirme a mi baño.

Me miró al espejo, me lavo la cara y me seco con la toalla. Me vuelvo a mirar al espejo.

- Debo olvidarte a cómo dé lugar, Noah- le dije a mi reflejo- Lo que me has hecho sentir es lo que me hace daño, me has embrujado sin mí maldito consentimiento.

Camino en dirección a la ducha.
Necesito quitarme este recuerdo.

Me quitó la ropa que llevo y prendo la llave de agua caliente.

Cuando escucho por fin que cae el agua me meto a la lluvia artificial.

Estuvo mal, lo que hice estuvo mal; no debí acostarme de nuevo con Noah.

Pero... no lo sé, simplemente hay algo que me atrae a él como si de un imán y una pieza de metal se tratase.

(...)

Eran las 7:47 de la tarde, la clase de Chelo de Ana estaba ya por terminar.

Termino de decorar los cupcakes que he hecho y sonrió victoriosa al ver mi obra de arte.

Termino de decorar los cupcakes que he hecho y sonrió victoriosa al ver mi obra de arte

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Veo mi teléfono y le tomo una fotografía a mi cupcake.

La envío a Stone.

"Están deliciosos, trae a tu chica para que los prueben 🧁☀️"

Dejo mi teléfono cuando he confirmado que se ha enviado con éxito el mensaje. Agarro dos de los cupcakes y los pongo en la pequeña bandeja.

Camino con los cupcakes hasta la sala donde están terminando de practicar Ana y Hamilton.

Al verme Ana sonrió.

Llegaste a míDonde viven las historias. Descúbrelo ahora