DÍA SEIS.
Michael se despertó con los ánimos por el suelo y una resaca realmente insoportable. Claramente se arrepentía de la cantidad de alcohol que había ingerido la noche anterior.
Al abrir los ojos y llegar a sentarse en su cama, fue lo suficiente para que su estomago se retorciera y supiera que terminaría vomitando todo lo de anoche; así fue. Cualquier persona odiaba vomitar, y más aún con el amargo sabor del alcohol de por medio combinado con la comida de ese día.
Terminó de lavar su boca en el lavamanos y trago un poco de agua para luego escupir, esperando matar un poco el sabor que le había quedado. El dolor de estómago seguía permanente causándole grandes molestias, pero no tenía la intención de volver a arrodillarse patéticamente en la baldosa para seguir vaciando su cuerpo. Entro a ducharse con agua fría y se curó de la cruda física y moral que lo atacaba. Al salir se colocó una toalla alrededor de la cadera y arrastro sus pies fuera, hacia la habitación donde ya se encontraba Francisco bañado, vestido y fresco sentado en la orilla de la cama.
Michael solo bajó la mirada y se dedicó a lo suyo, buscar algo de ropa para ese día. Se mantuvo en silencio mientras que la mirada oscura de su prometido no lo dejaba en paz, lo podía sentir. Bien recordaba la noche anterior, no había sido buena en ningún sentido y ni siquiera habían llegado a dormir juntos, Michael había soltado un poco su lengua.
—¿Estás mejor?
Sorprendentemente, Francisco inició una conversación entre ambos.
—Si, yo... creo que si —. Suspiro profundamente mientras pasaba la camiseta por su cabeza. —Lo lamento.
—Solo fueron unas cuantas copas de más, nada realmente grave.
Michael frunció ligeramente sus cejas generando pequeñas arrugas en su piel, estaba demasiado confundido ¿solo había imaginado la discusión que había tenido anoche con Francisco o él había determinado ignorar todo lo que había decidido salir de sus labios?
—Cuando termines de vestirte, debes bajar a almorzar. Tu mamá quiere hoy continuar con el paseo, y al parecer todos estamos invitados a una fiesta con temática mexicana —. Se levantó de la cama y dejó un suave beso en la frente del menor antes de salir de la habitación cerrando la puerta detrás suya.
Lo hizo con muchas dudas invadiendo su adolorida cabeza. Se preguntaba que era en su totalidad lo que había sucedido anoche en el bar, por qué había tomado de más... aunque de esa parte si se acordaba. La imagen de Luke diciéndole que lo quería ver feliz junto a Francisco invadió su mente de nuevo y, su corazón se estrujó.
Necesitaba de verdad un descanso, despejarse de todo o iba a terminar horriblemente mal. Cuando bajo se encontró con la comida en la mesa, su mamá y su papá con cálidas sonrisas y a Billy evitando en cada momento su mirada. No se preocupó porque tarde o temprano terminaría hablando con su hermano.
—Lamento no poder ir con ustedes hoy. Josh me ha pedido que le ayude en el restaurante hoy —. Habló el mayor mirando solo a su mamá.
—¿El amigo de Luke? —. Cuestionó Michael.
—También es como su "jefe". En fin, el me necesita para otras cosas además de lo de Luke, así que nos veremos allá más tarde, ¿cierto, mamá? —. La mujer asintió con una tranquila sonrisa en sus labios, claramente notaba el tono de indiferencia con la que su hijo mayor hablaba.
Cuando Billy acabo de comer, se levanto y al disponerse a irse, Michael lo siguió.
—¿Podrías decirme que es lo que hice para que me estés tratando así?, ¿Acaso yo...?
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want you back ✨Muke✨
FanfictionLuke tiene 10 días para recuperar el amor de Michael, demostrando de Francisco (el nuevo novio de Michael), no es el mejor. se embarca en un juego de conquista donde posiblemente es la única forma en la que se da cuenta que su primer amor ya no le p...