Las luces se encienden y saben quien eres.
¿Tu sabes quien eres, AhReum?
Lovesick Boys #1
Fecha de Inicio: 21/09/2020
Fecha de Finalización:16/11/2020
Prohibida su copia o adaptación.
Portada por: @Kimjongdaesang
Co-Escrita por: @Kimjongdaesang
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Acomode por última vez la diademada sobre mi cabeza mientras veía mi reflejo en la cámara de mi móvil, por dios, le había puesto tanto esfuerzo a mi ropa de hoy que yo misma me sorprendía.
La notificación de un mensaje de JaeHyun llamó mi atención.
«BFF»
«Te ves demasiado linda, no puedo creer que te hayas vestido así para el inútil de DoYoung.»
«Si voy a hacer un trabajo, lo haré bien, Jae.»
Bloquee el teléfono y lo dejé caer dentro de la pequeña bolsa que colgaba de mi hombro. Me coloque las manos en la cintura y sople unos cuantos cabellos que caían sobre mi rostro.
—Pues, para ser tan responsable, está llegando 10 minutos tarde.— Fruncí el ceño, mientras lo buscaba entre las personas que entraban y salían del museo.—Espera...
«¡¿Y si me dejó plantada?!» Viniendo del aburrido de DoYoung, era una posibilidad. Quizás me dejó plantada porque tenía que hacer una investigación o algo así.
—Maldición.— Caminé unos centímetros hasta llegar a una banca, donde tome asiento.—Me ha aplicado una carta de reversa.
No puedo creer que ese idiota me haya dejado plantada en un museo, ¡Un museo! ¿A donde se supone que iré ahora? Incluso había buscando en Internet sobre los cuadros que exponían en ese lugar.
—Disculpa.— Una voz jadeante me saco de mis lamentables pensamientos.—Tuve un percance.
Llevé mi mirada hacia la persona a unos pasos donde me encontraba, el cabello negro se le pegaba a la frente por el sudor provocado por una carrerilla, el pantalón de tela negro marcaba notablemente su cintura y dejaba ver sus piernas largas, mientras que el suéter de mangas largas marrón abrazaba su torso levemente.
«Es tan... Aburrido.»
Me puse de pie y forcé una sonrisa intentando que se viera mi falsa felicidad de estar ahí.
Con DoYoung.
En un museo.
—Hola.— Salude mientras me acercaba a él.— Estaba empezando a pensar que me habías dejado plantada.
—Lo pensé.— Su sinceridad hizo que abriera mis ojos ampliamente, él solo se alzó de hombros.—Pero tu existencia no es tan molesta como pensaba, así que vine.
«Qué maneras más extrañas tienes de ligar, Kim.»
(...)
«Alguien sáqueme de aquí.»
Habíamos pasado una hora dando vueltas por el lugar y DoYoung no había parado de hablar. Una vez que nos posicionamos frente a una pintura, yo me encargaba de leer el nombre en la placa de metal y el más alto empezaba a hablar sobre su historia y la de su creador.
