Morosis; Kim DoYoung; LS#1

04

—Así que... ¿Eres de Seúl? —Pregunte en un intento de mejorar el ambiente. Probablemente habían pasado unos 10 minutos desde que llegamos, estábamos sentados con nuestras respectivas ordenes y solo nos habíamos sentado a mirarnos en silencio.

—De Guri. —Sus respuestas eran tan firmes, que hacían que me costara un poco llevar esta conversación a flote. —¿Qué edad tienes?

—Veinte. —Apoye mis brazos en la mesa, dejando mi rostro entre mis manos, y le sonreí ampliamente. —Veintiuno la próxima semana, ¿Qué hay de ti?

—Veintiuno, hace poco que paso mi cumpleaños. —Tal vez DoYoung tenía un problema en el rostro. Porque no hacía expresión alguno mientras hablábamos.

—¿Abril?

—Febrero.—Corrigió rápidamente.

—¡Un chico romántico! —Retiro lo dicho, si mostraba expresiones, siempre y cuando fuera una de molestia o que me estaba juzgando fuertemente. Pero no me importaba en realidad. TaeYong me había juzgado lo suficiente a lo largo de nuestra amistad, como para que me importara que alguien como el perdedor que tenía frente a mi lo hiciera. —No me mires asi, ya sabes, febrero, mes del amor. Duh—Moví mis manos, obviando lo que acababa de decir.

—Supongo.—Se encogió de hombros, y luego miro el reloj que llevaba en su muñeca. —Creo que esta por acabar mi tiempo libre, así que debo irme, fue un gusto charlar contigo... —Su voz se fue apagando, sin saber cómo terminar su oración. El muy idiota no recordaba mi nombre.

—AhReum. —Sonreí, finalizando su oración.

—Claro, AhReum. —Se levantó de su asiento, al parecer un tanto apresurado. —No vemos por ahí, supongo. —Antes de que saliera del local, tome su brazo, deteniendolo.

—¿Puedo tener tu número? —Estire mi celular desbloqueado, esperando que el chico lo tomara y registrará su contacto.

—Yo... —Miro mi mano, y luego a mí, soltando un suspiro.—Claro.—Finalmente tomó el aparato, tecleando un par de números, para luego devolvérmelo, mirando mi fondo de pantalla. —¿Te gusta Harry Styles?

—¿Lo conoces?

—No creo que haya alguien que no lo haga, tiene buenas canciones. —Pude ver un leve asomo de sonrisa en sus labios. Termine por reír ante su respuesta, pues recordé como JaeHyun comentaba que aquel artista no tenía buen sentido de la moda, por lo tanto su música apestaba y que probablemente debería dejar de escucharlo. Y si le comentaba esto, probablemente se burlaria mucho.

—Te veré en la semana, DoYoung. —Asintió, saliendo del local, sin mirar atrás.

(...) 

—No puedo creer que lo hayas logrado. —TaeYong se cruzó de brazos frente a nosotros.

—Siempre te lo he dicho, TaeYong, todo en esta vida es posible. —Me levanté del regazo de JaeHyun, para celebrar mi gran éxito en aquella "Cita" con DoYoung. —Soy una mujer con grandes expectativas. ¿No crees que seré buena en la política?

—Seguro. —Sacó su teléfono, casi ignorándome.

—No se con quien te juntas ahora, pero estas más amargado que nunca, ¿Estás bien?—Preguntó JaeHyun desde su asiento.

—Si, es solo que no me hace gracia lo que están haciendo.

—No tienes de que preocuparte, solo será por un corto tiempo. —JaeHyun movió su mano, restándole importancia. —Ahora, cuéntanos, ¿Qué has hecho?—Sonrió con malicia, anticipando mis grandes hazañas.

—Es un arduo trabajo, para que sepan. —Saqué mi teléfono de mi bolsillo, mostrandoles las conversaciones que había tenido a lo largo de la semana con DoYoung.

—¿Estás segura de que está funcionando —La risa de JaeHyun no tardó en salir. —Te responde cada dos días, AhReum. —Y como dicen, la curiosidad mato al gato. De pronto TaeYong se encontraba a lado de  JaeHyun, mirando las conversaciones. —Al parecer, si es un hueso duro de roer.. —Ambos chicos intercambiaron miradas, y  rieron.

—Ni siquiera ha respondido tu último mensaje. —Se burló TaeYong.

—Bueno, no responde tan seguido, pero al menos lo hace. —Me defendí. —Yo estoy haciendo todo el trabajo aquí, por si no lo recuerdan, par de idiotas. —Exclame un tanto irritada. Ellos estaban desestimando mis méritos, y yo no lo iba a permitir.

—No me culpes a mi, JaeHyun te ha metido en esto, y si mal no recuerdo, tu aceptaste muy a gusto. —Aclaró el mayor.

—Si, bueno-

—"Hola, AhReum, disculpa mi respuesta tardía, estuve ayudando a mi hermano con sus asignaciones."—Leyó JaeHyun en voz alta, interrumpiendo nuestra pelea. Camine hacia él, tomando mi teléfono y respondí el mensaje. —No vas tan mal, si justifica su respuestas tardías. ¿Cuando lo invitaras a salir?

—Pronto.—Respondí rápidamente, haciendo que JaeHyun sonriera, pasó su brazo por mis hombros, y tomó mis mejillas, dándome un beso apretado.

—Ugh, guardenlo para después.

(...)

—Ice americano para ti y un rico bubble tea para mi. —Deje el vaso frente a DoYoung, tomando asiento a su lado. —Buenos días por cierto, ¿Qué tal estuvo tu fin de semana?

—Pesado. —Suspiró, tomando su bebida. —En nuestros tiempos, las tareas de la secundaria no eran tan pesadas.

—No se de que tiempos hablas, apenas llevamos un año fuera de la escuela.—Fruncí el ceño divertida. —Así que te la pasaste ayudando a Jeno.

—Si, y termine un par de asignaciones de la semana. ¿Qué hay de ti? —Su pregunta me tomo un tanto desprevenida. La última semana habíamos comenzado a charlar más. Yo usualmente le compraba café en las mañanas y le preguntaba por su día, pero él nunca preguntaba por el mio. Lo que quería decir que estaba avanzando.

—No mucho realmente. —Solo me he burlado de ti, junto con mis amigos. —No hago muchas cosas en los días de descanso. —Respondí, porque no podía ser sincera al respecto. Pues, mis fines de semana, solo se trataban de orbitar la mayoria del dia, cerca de JaeHyun.

—Ya veo. —Asintió ante mi aburrida respuesta. —Gracias por el café por cierto, mañana invito yo.

—Para nada, puedes invitarme a salir, y con eso queda pago.—Respondí con rapidez. Busque su mirada, y sonreí.

—Eso estaría bien. —Sonrió levemente. —Habrá una exposición de arte en el centro, ¿Quieres ir?

—Estaría encantada de ir.

(...)

—Incluso tendrás que estudiar para tu cita, AhReum. —Se burló TaeYong, mientras que yo lo mire sin entender. —No vayas a quedar como una estúpida frente al chico o perderá todo su interés.

—¿Qué te hace pensar que no se sobre eso? —Pregunté ofendida.

—Bueno, AhReum, hasta hace poco descubriste que las personas solo cuentan con un páncreas en su cuerpo, y no con dos.

—Le pasaría a cualquiera, además, mi carrera no tiene nada que ver con eso. —Espete molesta.

—Kim DoYoung está en la misma carrera que tu, y puedo apostar a que él lo sabe.

—Jodete, TaeYong, eres un pesado.—Me crucé de brazos.  —¿No le piensas decir nada? —Pregunte indignada.

—TaeYong, deja a Reum tranquila. —Dijo JaeHyun, haciendo el minimo intento de ayudarme. —Apuesto y tu tampoco sabes de eso.

—Pues si, pero no me avergüenza decirlo. —Admitió el mayor sin vergüenza alguna. Intercambiamos miradas y reímos al insinuó.

TaeYong probablemente era la persona mas simple que había conocido.