27: Más que nunca

527 73 6
                                    

Todo era bastante.

Habían luces. Luces blancas y ya no amarillentas como en casa de MinHo.

Hay un televisor. JeongIn jamás antes había visto uno encendido. Los clientes de su padre tenían pero no podían  encenderlos sin permiso y eso último era algo que su padre se avergonzaba de pedir.

Había espacio. Demasiado. JeongIn pensó que quizá quien viviera ahí debía sentirse muy solo, y no se equivocaba.

La cocina era amplia, tanto que el pequeño imaginó probablemente era del tamaño de toda su casa, contando el patio y el jardín. Se sintió impresionado cuando ChangBin abrió el refrigerador, repleto de comida.

Pero en la encimera hay más aún y JeongIn se pregunta si algo de eso será para él. Incluso él sabe que es mucho. Sabe que nadie morirá de hambre por darle un pequeño bocado.

Y es que estar en la cocina de ChangBin se siente tan bien. Como si de pronto el pequeño niño azabache pudiera alimentarse de solo respirar aromas tan exquisitos.

Tantos olores juntos comenzaban a marearlo. Y tanto qué mirar... Cada sitio al que volteaba era algo nuevo; algo que nunca había visto en su vida y quería descubrir, sentir y escuchar.

JeongIn se sorprende al recordar que no está solo. HyunJin lo llevó ahí y le dijo que podía usmear a ChangBin hasta que él los llamara, así que estaba con ChangBin en la cocina.

- JeongInnie~ - lo llamó el mayor con dulzura y el niño volteó.

- ChangBin hyung.

- ¿Tienes hambre? - JeongIn negó - dime la verdad, JeongIn, no está mal que lo digas.

- Mucha hambre, ChangBin hyung.

- Ven aquí. ¿Ves esto? Son panqueques coreanos. ¿Te gustan más las papas o los hongos?

- Papas.

- Bien, eres de los míos. Toma, pruébalo - dice extendiendo un par de palillos con un gran bocado entre ellos y JeongIn abre la boca - ¿está bueno?

- Muy bueno.

- ¿Adivinas quién lo preparó? - el menor niega - fueron Hannie y papá.

JeongIn sonríe y HyunJin lo hace también desde la puerta de la cocina. ChangBin lo mira de reojo y se dirige hacia él tomando la mano del pequeño.

- ¿Está todo listo, capitán Hwang?

- Todo listo, comandante Seo.

- ¿Por qué se dicen así? - pregunta JeongIn confundido.

- Es que HyunJin es el capitán de nuestra agencia súper secreta de espías.

- Ya no tan secreta, al parecer. Creo que tendré que destituirlo, comandante.

- Lo lamento, mi capitán. No volverá a pasar.

- Bien. Ahora traiga al príncipe a la sala. No olvide la corona.

- A la orden.

ChangBin carga a JeongIn y toma de encima del refrigerador una pequeña corona de flores blancas y rosas que encaja perfectamente en la cabeza del pequeño. JeongIn sonríe y ChangBin está satisfecho.

- ¿Te gustan los animales, Innie?

- Sí, me gustan mucho.

- Eso es bueno. Cierra tus ojitos, yo te digo cuándo abrirlos.

El pequeño obedece e incluso se cubre los ojos con ambas manitas. Al llegar ChangBin lo deja en el suelo y después indica que puede mirar.

Lo primero que el niño ve, después de escuchar un sorpresivo "feliz cumpleaños", es a su padre tiernamente vestido de jirafa. Y corre para abrazarlo, porque se siente feliz de verlo así. Se siente contento, más que por ser su cumpleaños, porque su padre no está trabajando y se encuentra ahí, vestido de jirafa y con una enorme sonrisa.

Kkami ・:*:・✿ Aɳxιҽƚყ [ChangJin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora