Kkami ･:*:･✿ Aɳxιҽƚყ [ChangJin]

57: solo es tiempo

- No me gustan los medicamentos. Trabajo para un despacho de abogados poco más de 30 horas a la semana, pero algunos días terminar la jornada es imposible. Solo no puedo seguir tecleando y no hay nadie que lo entienda. Es... Solo me paralizo.

HyunJin se acomoda en su lugar; un sofá individual color vino tinto que le queda grande ahora, direccionado como el resto de asientos hacia un centro dentro de una habitación oscura. Se siente tenso en el silencio momentáneo, pero otro chico comienza a hablar ahora. Es pelirrojo y bastante joven. HyunJin lo recuerda, pero no sabe de dónde.

- Acabo de graduarme. Sí, tengo 19 años y por fin me gradué del Instituto, pero no puedo entrar a la Universidad. Intento hacer los trámites yo solo y no lo consigo, y mi madre se enoja cada vez que no puedo concluirlos. Porque entrar a una Oficina me es difícil. Porque... Cruzar el edificio y ser visto es algo que no puedo hacer. Me aterra.

De nuevo hay silencio, pero nadie se preocupa. Es como si siguieran un orden no escrito que no hace falta recordar, porque fluye solo.

- Bueno, esta semana tuve un ataque de ira cuando llegaba a casa después de recoger a mi hermano menor del Colegio. No soy tan impulsiva como antes, pero no pude evitarlo. No era su culpa, pero simplemente lo golpeé. Lo hice incluso si me pedía que parara hasta que mi madre llegó y una vez más me sedó. Odio que eso ocurra; ser un peligro para ellos... No quiero más. Pero no han funcionado muy bien las cosas conmigo.

La mujer rubia guarda silencio y otra chica se acomoda en su asiento para hablar. Parece llevar demasiado tiempo asistiendo y HyunJin se siente tranquilo cuando cuenta su semana.

- He estado probando cosas nuevas. Ya saben, para desviar impulsos y esas cosas - dice entre risas. Suena como una broma pero a HyunJin le agrada que lo cuente así - hice figuras de arcilla. ¿Pueden creerlo? Sirve. Paso horas para terminar una sola figurita, me distraigo y gano dinero. Me funciona por ahora al menos. Es algo para lo que sirvo.

Servir... No, esa palabra no combina con HyunJin en lo absoluto, y por eso está ahí: en un grupo de apoyo con más chicos y chicas ansiosos. Por eso se abraza sobre el asiento esperando no ser visto con las piernas flexionadas y por eso escucha sin emitir un solo sonido. Porque si algo puede servir debe intentarlo.

Hace casi una semana le prometió a ChangBin no volver a hacerse daño y eso es difícil. Pero lo ha hecho.

- Lastimo a las personas - murmura cuando los rostros se giran hacia él, expectantes de su historia pues no ha mencionado nada desde que inició la sesión - a mi novio, sobre todo. Él quiere que esté bien y por eso estoy aquí, pero tal vez... No creo que sea mi lugar. No tengo un lugar.

Pronto termina la sesión. Y a HyunJin no le gusta... ¿Por qué saber que hay tantas personas sufriendo lo haría sentir mejor...? Le da escalofrios.
Pero debe hacerlo. Un par de semanas más y listo, no tendrá que volver.

Se encuentra con ChangBin fuera del edificio. Es de noche y el mayor toma con fuerza su pálida mano para arrastrarlo hasta la casa.

- ¿Cómo te fue?

- Bien, creo.

No hay más conversación. No suena mejor que cuando entró, pero a ChangBin no le preocupa pues es un trabajo que tarda en hacer efecto y el menor no se ha adaptado todavía. Quizá la próxima semana entienda mejor el motivo para estar ahí, solo es cuestión de tiempo.

Y el tiempo pasa, los días y una semana finalmente. Y ChangBin tiene razón: esta vez es mejor. Esta vez HyunJin llora, pero no porque esté triste en sí. HyunJin llora porque fue una sesión intensa en la que se dijeron tantas cosas que era imposible no terminar llorando. Porque de alguna manera descubrió que era posible sentirse identificado con completos extraños. Que habían más personas viviendo lo que él vive a diario y pueden sobrevivir. Pueden estar mejor o al menos establemente. Y ChangBin cumplió su propósito; porque tal vez él no podía entender lo que jamás vivió, pero todos esos chicos serían un apoyo irremplazable.

Queda menos para terminar los 21 días; una semana, específicamente. Y los días han pasado rápido, sin HyunJin darse cuenta. Es extraño...

El tiempo corre, pero de tanto correr es probable que caiga, se rompa y nunca vuelva a andar. Porque el tiempo es así: constante, pero con un ritmo impredecible para HyunJin.

Pero esta semana se sintió muy bien. Exelente, diría él. Tal vez exagera, sí, pero no importa porque lo único relevante es que no está mal. Que no se ha hecho daño y que ChangBin está feliz al respecto.

- Deberíamos ver a MinHo la próxima semana - propone el azabache cuando su novio se prepara para irse a la cama.

- Sí, deberíamos, pero ¿por qué?

- Solamente lo extraño un montón.

- ¿"Un montón"? ¿Desde cuando usas esa expresión?

- Me gusta, ¿a ti no?

- Sí, me gusta.

- Quiero ver a MinHo y a JeongIn, a Sunggie, a Woo, la señora Kang, el gatito, YeonJun, YeoSang... Quiero verlos a todos. A Felix, Chan y Minnie también. Los extraño un montón...

- La próxima semana será entonces.

- ¿Lo prometes?

- Mmm... No lo sé, tal vez no a todos, pero haré lo posible.

- Ya casi es otoño... Hará frío. Deberíamos hacer un banquete para ellos.

- Deberíamos hacer muchas cosas, HyunJin.

... Pero algunas veces el tiempo termina demasiado pronto. Solo es tiempo, en realidad; se derrama, escurre y se paraliza cuando quiere.

Si una semana pasa y las promesas no se cumplen, en verdad no pasa nada: puede volverse a comenzar. Aunque algunas veces no vuelve a ser lo mismo. Algunas veces... No quedan suficientes segundos en un reloj. No en uno descompuesto, al menos.

。･:*:･✿

Este capítulo es corto y no iba a publicarlo hoy porque no llevaba nada... Me costó.
No puedo... Kkami se termina en el próximo capítulo, ¿qué voy a hacer...? Morderme las uñas, de seguro.

Aiññññ... Me va a dar algo.