Esta es la historia sorpresa que hoy es la historia verdadera y pues espero que les guste y si es Pokémon Sol y Luna. Tn, Una chica única a lo cual tendrá la oportunidad de viajar a Alola, su nueva y Gran Aventura, en donde conocerá a amigos que le...
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Ash- ¿Entonces debo de ir allá?.... Entendido. -Mencionó el chico quien veía enfrente suya la gran torre pero alrededor suyo estaba la nieblas cubriendolos.- ¡Bien, vayamos Pikachu!. -mirando a su Pikachu quien afirmo llendo adelante de su entrenador.
Los dos caminaron hasta llegar a las escaleras a lo cual obviamente subieron sin pensarlo hasta llegar al final de estas. Ash asombrado abrió su boca al ver la gran torre pero quería continuar su paso pero al tocar el suelo debajo de el se rompió dejándolo sin paso.
Ash- ¿D-Donde estamos?. -Dijo al ver más Torres de piedra a su alrededor junto con la torre delante de el.
Pero un extraño sonido ruidoso alarmó a Ash y Pikachu quienes miraron al cielo oscuro y cubierto de Niebla como una grieta se abría y de ella salió el legendario Pokémon de alola, Solgaleo.
En la izquierda salió otro portal, reflejando al segundo Pokémon legendario de esa región, Lunala. Los dos Pokémon rugieron sorprendiendo a no más poder a los dos individuos recién llegados.
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Ash- ¿Solgaleo?, ¿Lunala?. -Mencionó al verlos desender un poco hacia el.- Claro, como digas, Solgaleo y Lunala. Lo prometo. -Mencionó al escuchar las peticiones de esos dos Pokémon quienes asintieron para así irse donde los Portales y convertirse en una gran luz que alumbró el lugar, pero Ash miro como dentro de esa gran luz que apenas podía verlo un pequeña criatura o mejor dicho un pequeño Pokémon formándose.
Mientras tanto en cada isla, los 4 Guardianes sintieron la gran presencia del Pokémon que se formaba delante de Ash. Pero ellos no fueron los únicos quienes lo sintieron.
En una cueva se encontraba un chico Rubio tratando de controlar a su Pokémon quien de una forma desconocida para el, se empezó a descontrolar.
Gladion- ¡No lo harás!. -Mencionó tratando de que no fuera a las afueras de la cueva en donde se refugiaban.- ¡Lo siento, pero no puedo dejar que vayas a donde toda la gente puede verte!. Por favor entiende. -Dijo tratando de controlar a su Pokémon a lo cual logró hacerlo reflexionar.- Buen chico. -Dijo sonriendole a su Pokemon.- ¿Podria ser?....... ¡¿Un Ultraente?!.
