Escapando y Recordando

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Logré evitar a Enmanuel el viernes y el sábado pasado; no fue fácil, pero lo logré, a decir verdad, me sentí como en una película de espías; a cada rato estaba mirando las esquinas de los pasillos a través del espejo de mi polvera para ver si por algún lado venía Enmanuel para cambiar de inmediato mi camino, evité las áreas comunes; comí en mi casa el viernes y el sábado almorcé en un café cercano - con más de diez calles de distancia, como mínimo - Mi look abandonó las blusas holgadas y le dio la bienvenida a las sudaderas anchas con capuchas, las gorras y a los deportivos, parecía toda una atleta rumbo a entrenar para las olimpiadas, además no me puedo olvidar de la mascarilla que cubría mis labios y en especial de los mega lentes estilo policía que he usado durante estos dos días para evitar que vieran mi rostro - evitar que Enmanuel lo viera - eran el toque perfecto para mi look de "incógnita".


Pero hoy no sé qué hacer, es mi primera clase con Enmanuel desde la noche pasada, ¿estará molesto? ¿tan siquiera le habrá importado? Talvez solo este preocupado de si lo divulgaré; un rumor como este haría que lo despidan a causa de que pondría en duda su profesionalismo, su ética y en especial su parcialidad al evaluarme a mí junto a otras estudiantes, acusándolo de preferencias y en especial de favoritismo, la verdad es que sería sumamente desagradable.


Aunque, él no se ha caracterizado por alabar mi trabajo, por lo que pienso que las chicas celosas - y algunos chicos también - podrían rumorar que fui yo quien lo sedujo para que mejorara mis notas - las cuales a pesar de su odio son bastante buenas - siento que muchos alumnos y profesores se inclinarían por la versión villanesca de mi persona y victimizarían sus acciones - así me expulsarían a mí y lo conservarían a él - Todo esto es peor que tener un tubo atravesado en el trasero, ¡QUÉ HARTERA!



... ... ... ...



Hoy si debo ir a su clase, lo sé, pero no me atrevo a enfrentarlo, este numerito de chica fugitiva me sirve para los días en los que no tenemos clase, pero verlo en el aula es otra cosa, no sé si seré capaz de soportarlo... creo que lo mejor es ir, ósea no quiero que piense que soy una cobarde y que para mí nuestro "encuentro" fue algo especial, ¡No soportaría que el creyera que me tiene "lista" y que estoy babeando por él, mientras compro acciones en su club de fans! ¡¡ESO SI QUE NO! PRIMERO MUEEERRRTA ANTES DE DARLE EL GUSTO DE CREER QUE ESTOY ENAMORADA DE ÉL...


Al instante comencé a revolotear en los cajones mientras pensaba; ¿En dónde habré dejado mi suéter blanco tejido con botones dorados?, no es lo más cómodo para esculpir pero se me verá genial con un brassier suave que permita destacar la forma y el movimiento natural de mis pechos - no creas que olvidé como los besabas con tanta vehemencia ... como los recorrías sutilmente mientras me penetrabas con lentitud... - cerré mis ojos y recordé la sensación suave y firme de su tacto, la sutileza de sus manos al recorrer mi cintura ascendiendo hasta mis hombros, lamiendo mi cuello...


Mi cuerpo revivió su movimiento deliciosamente tortuoso al entrar y salir de mí, de repente pude sentir sus mordiscos suaves sobre mis pezones que me erizaban la piel, dándome deliciosos espasmos que me incitaban a perderme poco a poco en el deleite de sus caricias, su tacto firme cubrió nuevamente mi cuerpo, sus besos pasionales cubrieron una vez más mi piel, su movimiento profundo y lento me enloquecía, su fuerza y su pasión me inmovilizaban dejándome otra vez debajo de él...


Yo estaba deseosa de sentirlo nuevamente, ansiosa por volver a ser suya... anhelaba entregarme a él de nuevo y sentir el adictivo vaivén que me enloquecía, quiero sentirlo más .... maaaas... quiero mucho maaaas... más hondo... más duro... sigue... dame más... más ... ¡Sí! ... ¡Así! ... ¡Así! ... ¡Siiiiii! ...


¡¡¡¡¡¡¡¡¡ aaaaaaaaaaaaahhhhhhhhhhhhhhhhh!!!!!!!!...


¡AH! ... AH ... Ah ... ah...


Solo podía escuchar el fuerte resoplido de mi respiración, sentía la humedad cálida que me inundaba y se escurría por mis piernas, mis ojos poco a poco fueron abriéndose para buscar a Enmanuel, pero solo encontré un cuarto vacío y el eco de una agitada respiración que poco a poco se empezaba a normalizar, ¿Dónde está Enmanuel? ¿A dónde fue tan rápido? Mis ojos lo seguían buscando como locos, tratando de encontrarlo y mientras lo buscaban caí en cuenta de que él nunca estuvo aquí, la penetración que sentí eran mis dedos tratando de emular su movimiento, su tacto, sus besos, su pasión, su todo....reí sarcástica, no puedo creer que me masturbara pensando en mi profesor - en mi maldito profesor - ósea sé que sus besos y caricias fueron deliciosas, soy consciente de que lo disfruté, tengo claro que fue delicioso tanto la forma salvaje e incontrolable como la tortuosa y lenta, soy perfectamente consiente que es un buen amante - excelente amante - pero... ósea, sigue siendo Enmanuel, aún sigue siendo el maldito desgraciado que me ha menospreciado y jodido la vida desde que pise las puertas de la universidad, como es posible que solo por un simple faje - delicioso faje - yo pretenda olvidar sus humillaciones y groserías y jugar con él a los amantes prohibidos, eso es demasiado, no puedo hacerlo, simplemente no puedo, NO QUIERO, NO ME DA LA GANA DE CEDER ANTE ÉL, primero muerta y bañada en sangre antes que mostrarme débil...


- Un segundo - dije exaltada, aun con mis dedos en mí interior y mi otra mano sobre mi seno...


- ¿Qué hora es...? – Miré agitada por la ventana y vi la luz del día con claridad, el sol brillaba con fuerza lo que me hizo pensar que eran más de las ocho de la mañana, alce mis ojos buscando el reloj de la sala y vi la hora; eran las ocho y media de la mañana, lo que me daba media hora de retraso a su clase, yo aun ni me había vestido y aunque quisiera ir - como si en verdad quisiera - tenía que lavarme, vestirme y recorrer las doce calles que me distanciaban de la faculta, eso me tomaría entre quince a treinta minutos ósea que posiblemente llegaría para ver a todos terminar de lijar sus trabajos y Enmanuel me lanzaría un comentario odioso acerca de mi retardo... sí, lo mejor es no ir, ósea no es como si una clase hiciera mucha diferencia...



... ... ... ... ... ... ...



Han pasado cinco días más y aún sigo sin ir a sus clases, en total lo he evitado por siete días académicos – nueve días contando el fin de semana pasado - no entré a ninguna de las cinco materias que veo con él - incluyendo las materias optativas - y mucho menos he ido a sus asesorías en el taller, en total llevo dos inasistencias en cada materia, no es la gran cosa, no es como si fuera a reprobar por ello, ósea no hay forma en la que él pueda hacerme perder el año solo por dos faltas en alguna materia. Solo necesito relajarme, mañana es domingo - NO HAY CLASES - por lo que leeré un poco, adelantaré algunos trabajos teóricos, dormiré, pasearé un rato, y alistaré la ropa que usaré para ir el lunes a clases y ver a Enmanuel, ósea todo estará bien...

ArrebatoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora