VEINTICUATRO

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☀️

Había preocupación en el entorno, los que fueron cambiantes se quitaron la ropa para transformarse en lo seres fantásticos que en realidad eran y Fátima tenía en su bolsa diferentes formas para tratar de ayudar a Brielle porque de verdad se preocupó no solo por la mujer si no por el futuro que tendría el bebé de su hermano Mourad en este difícil momento de su vida. 

— ¿Qué te costaba decirle a tu esposa que estaba embarazada?

— No ahora, Fátima.

— ¡Si ahora, Mourad!

El Alfa de Chacal tenía la forma del animal pero erguido y mas humanizado de un color negro y ojos demasiado dorados que al mismo tiempo competía en tamaño con el Alfa de Oso y el Alfa de Lobo estos últimos en un tono pardo. lo increíble del asunto es que de los tres Alfa el único que podía transformarse en humano sin todo el drama de cambio era Mourad porque en su corazón estaba la Magia del Desierto y el enlace con Anubis. 

— ¡Dile eso al destino que ha hecho de mí la peor de las burlas cada vez que le digo que está esperando un bebé! — Le recriminó a su hermana. 

Un destello de luz llamó la atención de todos allí y la alerta significó en su momento que debían ir, sin embargo, la escena fue otra; cuando se acercaron notaron que Brielle estaba atacando con esferas de energía a una bestia que nunca en sus respectivas vidas habían visto, aquello era una enorme serpiente con el torso de una mujer y una a la cual Mourad enseguida reconoció como Cordelia.

¿Cómo era que una humana  se podía transformar en una Naga o una Equidna? 

Fátima supo en su momento que era hora de actuar para tranquilizar a Brielle porque cada vez que ella estaba usando sus poderes todo a su alrededor carecía de vida por la energía mágica robada. De verdad, lo que decía Mourad acerca de la Raza Ijkkai no era mentira porque Brielle no tenía control de lo que hablaba o incluso de lo que hacía.

— ¡ERES UNA MALDITA!

Brielle reaccionó desde una distancia prudente y con la energía de la tierra fue capaz de remover por debajo de la superficie para hacerle perder a la mujer bestia el equilibrio.

— ¡SABÍA QUE IBAS A CRECER COMO ÉL! — Vociferó con terror: — ¡NO DEBISTE NACER Y NO ME VOY A RENDIR DE MATARTE PORQUE  ME HAS HECHO DAÑO¡

Cordelia tomó aliento y luego expulsó fuego como una certera amenaza para que Brielle no se acercara hasta donde ella.

— ¡ME DIJERON QUE NO IBAS A RECIBIR NADA DE TODOS ELLOS! —Le expresó de forma histérica: — ¡LOS ODIO A TODOS USTEDES INMUNDOS INFELICES!

—No puedes hacer nada en mi contra con tus insultos y secretos, madre. —Brielle la enfrentó pero con algo de locura en sus ojos extraños: —No me importa lo que digas pero debo detenerte y aquí obtendrás tu límite.

— ¡HOY MORIRÁS!

La cola de la mujer serpiente se movilizó en contra de Brielle con una fuerza descomunal, pero en el momento, el Lobo Alfa de Fane Krussen apareció para recibir el golpe que lo lanzó por los aires aterrizando fuertemente sobre una arboleda. Por su parte, Iván quiso tomar desprevenido de la mujer por su cola pero está lo enredó entre ella para comprimirlo hasta que se escucharon los huesos del Alfa de Oso crujir, con el solo grito del cambiante ella lo lanzó lejos. 

Mourad al final tendría una enorme discusión con Shannon pero por la gracia de la naturaleza el ahora hombre estaba luchando por permanecer en pie.

AMORES DE GREENVILLE 3: La Bailarina y El Chacal *FINALIZADA*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora