capitulo 25

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Drang:

"Abandona todo lo que eres" había dicho

"Abandona tu vida y tus privilegios"

"Abandónalo todo"

A veces ser estúpido, te salva del dolor. Voy a creer que eso fue lo que ocurrió. ¿En qué momento el humano rebaja su nivel hasta caer por el amor? ¿por qué hacemos esas cosas? Mandamos sobre todas las especies y somos inalcanzables, pero una pequeña emoción, un sentimiento parecido a una enfermedad, nos vuelve en seres completamente estúpidos. Ser estúpido es tu escape a la realidad y la realidad es, que eres más pequeño de lo que pensabas.

- ¿por qué simplemente no lo ignoras todo y te vas? – Marella, estaba sentada a la par mía en un comedor. Ambos comíamos unas frutas que eran bastante amargas, de vez en cuando veía su ceño fuñirse.

- ¿cómo me podría ir y dejar a mi corazón aquí? – fue lo que respondí - ¿Cómo vivir sin corazón?

- Te entiendo – ella me aseguró

- ¿Cómo?

- Solo lo hago, pero te diré una cosa, mientras ella te ame. Aunque estén separados a largas distancias, tu corazón seguirá latiendo.

- Hay un problema con eso – le dije

Hace varios días abandone el modo "Odio hacia todo ser que se mueva" Me siento tan vacío que ni siquiera el odio puede llenarme.

- ¿Cuál? – me dijo mirándome de frente ahora. Marella tiene ojos tan azules, parece que literalmente los hubiesen pintado así.

- Ella no me ama

- ¿Cómo sabes que es así?

- ¿Cómo podría amarme? La intenté asesinar tantas veces, incluso yo me odio

- Bueno sí, yo suelo odiarte en veces – dijo la chica rubia, sé que lo dice en broma – es decir, me dabas mucha tarea para cuidarla

- ¿lo siento? – dije sin sabes que decir, aunque agregue en defensa propia – yo le enseñé a defenderse y tú solo la observabas

- Es mejor que intentar matarla

- Se hizo fuerte al menos

- Ser fuerte no se hace a la fuerza

- Eso no tiene sentido ¿sabías?

- Nada en esta vida tiene sentido

- Eso no ayuda

Miré de nuevo mi plato. Casi no había comido.

- ¡Hey rubio! – dijo ella y me miro con cariño maternal – nada le pasará, estamos aquí para protegerla

- No hemos hecho el mejor trabajo

- Ella no es precisamente sencilla de cuidar. Pero, por eso mismo estará bien

Quise retener mis palabras, pero dije:

- ¿y si lo hace? – miré a la rubia - ¿si ella despierta? Es el mismo círculo, no me ama, yo sí. ¿tengo que perseguirla hasta que ella decida quererme?

- No, claro que no. Puedes irte, puedes conseguir a alguien más. Puedes dejarla y estás en todo tu derecho ¿pero quieres hacerlo? – ella intento voltear mi rostro hacia ella, pero me mantuve mirando mis manos - ¡mírame! – exigió, no hice nada y ella movió mi cara con sus dos manos. Me hizo mirar su rostro – si vas a luchar, quiero que sepas que es tu decisión, si quieres irte, eres libre, ella no te obligaría a quedarte. Pero si lo haces, si buscas su amor y si lo consigues, será porque quieres hacerlo.

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