capitulo 24

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Zephyr:

Las cosas se manejan distinto aquí, primeramente, la mayoría son niños. Todos los adultos son guardias o ayudan, pero los niños parecen dedicarse a cantar junto a una fogata en la pared. No sé qué cantan, creo que es un idioma antiguo. Sea lo que sea me hace sentir en casa, protegido. Europa aparece en la sala y se va de manera continua, todos buscan sus consejos y sus instrucciones. Me parece sorprendente que a su edad sea una líder, quiero preguntar, porque mi primera impresión al verla fue que había sido la roca durante mucho tiempo. Como si siempre hubiese estado sola.

- ¿Qué te han dicho? – pregunté a Dánae, quien de curiosa había preguntado que había ocurrido aquí hace unas horas

- Solo saben, que hace meses el circuito 35 viene haciendo cosas extrañas, incluso le han llegado a quitar recursos al 34, también que muchísima gente se fue hacia allá y la que quedó aquí, no se sentía a salvo – ella se había sentado en el suelo junto a mí, ambos recostados sobre una pared de vidrio grueso por el que se veía el bosque

- ¿y de ella? – agregue luego

- Marella y Drang están en su habitación, aquí hay una especie de área destinada a la enfermería y ahí la tienen, dicen que – ella tomo aire como si preparara para decirlo – está en coma y no saben si despertará

- Lo hará – afirme con mi corazón

- ¿Cómo lo sabes?

- Es fuerte – me reí en voz baja – y obstinada, no se dejará vencer

Ella solo me miro. En sus ojos miel, había una pequeña capa de lágrimas sin derramar, como una niña que tiene miedo, como Dánae, la chica que puede ser tanto el monstruo como la presa asustada. Abrió sus labios para decir

- ¿y si no lo hace? – su voz baja - ¿si ella no vive? Es decir, no la conocemos, pero, salvó la vida de la pequeña niña y yo

- Hey – la interrumpí – no tiene que haber hecho algo bueno para merecer estar viva, pero si fuera el caso por supuesto que lo merece y ella no permitirá que le quiten esa victoria

- ¿eso crees?

- Estoy seguro

Ella me abraza. Y yo me aseguro de que sepa de que siempre estaré para darle ese abrazo. Desde mi corazón, sé que ellas son más que el mundo y eso basta para mantenerlas vivas. Y ahora, están completas.

Esta tarde, teníamos una pequeña reunión con Europa para planear la salida. Teníamos que ser muy rápidos. Pero al entrar a la sala, ella estaba mirando el escritorio como si fuese lo más importante del mundo. Luego nos dijo.

- No podemos ir hasta dentro de una o dos semanas – lanzó

- ¿qué? – habló Dánae - ¿cómo sabrán en el 21 que seguimos en la misión? Y ¿qué pasa si esperamos más y atacan de nuevo?

- No lo harán – dijo ella – tienen que hacer varios papeles para usar las armas biológicas, podrían tardar mucho con ello – la habitación en la estábamos era simple, ella detrás de un escritorio de madera en medio de una habitación de madera sin muebles y luces de bombillas amarillas

- ¿tienen más armas no?

- Claro, pero no las desperdiciarán en un circuito que creen que han exterminado ya

- ¿cuál es el plan? – pregunté

- Se quedarán, les daremos comida y techo, ustedes deberán ayudar a buscar heridos y traerlos con mis oficiales durante esa semana. Luego, les enseñaré la manera de entrar al circuito y los acompañaré

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