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...La clase con McGonagall no estuvo tan mal, a pesar de compartirla con Slytherin y tener que soportar los comentarios de Malfoy y sus amigos –que según ellos, eran divertidos, pero dejaban mucho que desear.
Hermione ganó cinco puntos para nuestra casa, de los cuales, yo perdí tres por responderle un comentario a Pansy Parkinson. Al parecer, la broma de Malfoy con la poción del olvido iba a ser motivo de burla por un largo tiempo. La verdad, esperaba con ansias la siguiente. En mi mente, ya había maquinado de tres a diez comentarios sarcásticos para contestar, dependiendo de la burla en cuestión.
Afortunadamente, la profesora McGonagall nos permitió elegir a nuestra pareja para el trabajo que estaríamos realizando, y al parecer, también para los próximos. Así que, Hermione y yo tendríamos mucho tiempo de calidad juntas. Bueno, más del que ya tenemos de por sí.
Pociones tampoco fue emocionante como anticipé iba a ser. Tal vez el hecho de que esta vez tuve la suerte de tomar un asiento lejos de la Serpiente Mayor tuviera algo —o mucho— que ver. El profesor Slughorn quedó satisfecho con mi trabajo en el caldero. Esta vez, Ron y yo hicimos equipo, lo que significaba tener un medianamente buen asistente, siempre y cuando yo hiciera la mayor parte del procedimiento. Claro, exceptuando las veces en las que el profesor se daba una vuelta por nuestra mesa.
El asunto de mi calificación pasada también quedó resuelta en cuanto respondí una pregunta relativamente fácil sobre las esporas de vainilla de viento, el efecto que tenía en los trolls y en que era usada comúnmente. Resulta que, al parecer, los trolls son alérgicos a estas, ya que estornudan cada que florecen, y su función principal es como un ingrediente más en el antídoto de venenos comunes.
Caminaba por los pasillos del castillo con Hermione colgada de mi brazo, quien no paraba de hablar sobre las diferentes opciones que teníamos para el trabajo de McGonagall. Sorpresivamente, mi cerebro estaba de buenas y pude entender la mayoría de cosas que mi amiga explicaba con lujo de detalle.
Para cuando nos encontrábamos frente a las puertas del Gran Comedor, nuestro proyecto ya haba sido elegido. Hermione decidió que lo mejor que podíamos hacer, era una demostración de desvanecimiento y conjuración de algún objeto. A pesar de mis protestas que, por obvias razones tenía, mi compañera no iba a dar su brazo a torcer. ¡Casi había perdido una pierna y ella pensaba en hacer desaparecer cosas a diestra y siniestra en clase! Era increíble.
—¡Solo piénsalo, Blake! El desvanecimiento es de lo más complicado que hemos visto desde el cuarto año y si logramos ejecutarlo correctamente, tendremos una buena calificación final asegurada —Sus ojo brillaban con la idea y yo podía jurar que en su cerebro se estaba imaginando nuestra presentación siendo la más exitosa de todas y la ganancia masiva de puntos que la profesora seguramente nos daría.
Por el otro lado, yo podía ver como arruinaba todo por alejarme más de lo debido de la mesa y fallar el hechizo, dándole a algún estudiante, mandándolo a la no-existencia y luego teniendo que escribir una carta larguísima a sus padres por la perdida accidental de su hijo o hija. Eso, en caso de seguir viva después de arruinar por completo el perfecto plan de Hermione.
—No estoy segura, Mione, sabes que no fui de las mejores en esa clase hace dos años y después de lo que pasó en Pociones, no creo ser la más capacitada para lo que tienes planeado.
—En primer lugar, lo que pasó no fue tu culpa. Si Draco Malfoy no hubiera derramado esa poción sobre ti, no tendrías este repentino miedo irracional; y segundo, anticipé tu respuesta, así que, yo haré la parte difícil que es el desvanecimiento y tú harás la conjuración. Solo tienes que traer lo-que-sea que yo desaparezca de vuelta.
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not a mudblood » d.m.
Fanfiction⚠ En esta historia no habrá trama secundaria que tenga que ver con los libros/películas. ⚠ » historia en edición. __________ «No creas por un segundo que me intimidas, Malfoy.» «Puede que no te resulte intimidante, Dashwood, pero admite que sigo sie...