Deja Vu //Yeorry//

Twenty Four

- Hola unnie. -Saludó la más baja frunciendo su entrecejo al ver aquella pareja detrás de la castaña, quien tenía rasgos similares a ella, y curiosamente también a la menor de las Choi. - Hola... ¿Ellos son tus padres? Me parecen conocidos. -Preguntó de manera curiosa, para luego retroceder porque Yerim habría intervenido antes de que las miradas de aquella chica y sus progenitores se cruzaran.

- ¿Qué haces aquí Yeojin? -Eludió su pregunta con otra, pues se le hacía difícil mentir, y evitar era más sencillo.

- Bueno... No habíamos hablado últimamente y quería visitarte. -Se encogió de hombros ignorando el hecho de que las personas detrás de la castaña insistían con su mirada sobre ella.

- ¿Yeojin es tu novia? -Dijo a espaldas suyo la mujer sin mucho tacto ni discreción, logrando que los músculos de su hija se tensaran.

- Vayan al auto, por favor. -Nuevamente, evitó una pregunta con sus pómulos levemente rojizos.

- Te pregunté algo Yerim... 

- No, no es mi novia. Ahora vayan al auto. -Insistió la castaña esta vez volteándose hacia sus padres con una expresión dura en su rostro. 

- No debes por qué tratarlos así... Solo te hizo una pregunta... -Opinó esta vez la chica de cabellos dorados mirando la espalda de su mayor.

- No te preocupes Yeojin, de todas formas ya nos íbamos. ¿Cierto, cariño? -Preguntó el hombre esta vez mirando con una sonrisa algo extraña, dirigiéndose a su hija, quien rodó sus ojos asintiendo. - Iremos por Yena, juntémonos en la ubicación que te mandaré por mensaje. -Informó el más alto una vez que estuvo lo suficientemente cerca de su hija como para que un susurro pudiera ser oído.

- Solo no llamen mucho la atención, no le hace bien. -Pidió casi como un ruego la universitaria, sin importarle mucho los constantes ojos de la pequeña sobre la escena.

Una vez que ambos adultos hubieran asentido con la cabeza, hicieron un ademán de irse, y por fin la castaña dejó sus músculos relajarse de un solo suspiro. Dirigió su mirada hacia la curiosa chica en frente suyo, y volvió a suspirar, pues sabía que le preguntaría cosas al respecto. Sus ojos rasgados desprendían toques de confusión, junto a un ligero brillo en su pupila dilatada viendo con cierta admiración hacia la más alta, cosa que confundió un poco a esta misma, la miraba con extrañeza, de una manera que antes no había visto en nadie.

Segundos después de un pequeño trance, la menor sacudió su cabeza negando con su cabeza, confundiendo un poco más a Choi, pero antes de que esta pudiera decir algo, Yeojin la interrumpió.

- Bien... ¿Qué fue eso? 

- No te preocupes por ellos. -Dijo simplemente viendo como el auto de sus padres se alejaba por las calles de su vecindario. 

- ¿Puedo saber qué son de ti? -La insistencia de Im lograba divertir un tanto a su contraria, pero también estaba algo cansada y le molestaba un poco responder preguntas incómodas.

Pero no podía enojarse con esa chica, con ella no.

Suspiró bajando su mirada, tratando de encontrar las palabras correctas para describir a esa pareja, y una vez que lo logró levantó su mirada con algo de nostalgia y algo de pesadez por recordar su niñez y adolescencia. - Algo así como las personas que deberían cuidarme y criar. Pero no sé si lo han logrado, ni tampoco sé si los consideraría mis padres. -Se encogió de hombros tragando un pequeño nudo en su garganta, no quería llorar, ya habían pasado años de eso.

- ¿Tutores? 

- Sí... Podría ser algo así. No lo sé, no me gusta hablar de ellos. -Trató de evitar la mirada de su menor lo que más podía, pues sabía que en sus ojos se reflejaría su rencor. En cambio, le dedicó un suspiro mientras miraba a su derecha, dejando su perfil al descubierto.