Deja Vu //Yeorry//

Thirty

Si aquella mañana le hubieran dicho a Yeojin que la joven por la que sentía cosas indescriptibles le pediría ser su novia, no lo creería, probablemente lo hubiera ignorado, como si de una estúpida broma se tratara.

Pero ahora, en frente de la castaña, era difícil pensar que era mentira.

Se tomó su tiempo para responder, sabía que ello traería pros y contras, también que tarde o temprano tendría que contarle lo otro, tal vez. Estaba al tanto de que podían lastimarse, ella no quería eso, no quería verla llorar, mucho menos por ella y tampoco que la situación fuese al revés o mutua.

Conocía los riesgos de iniciar una relación con Choi en esos momentos, pero qué más da. Tal vez aquella oportunidad no volvería a presentarse y realmente no podía dejar pasar el cómo aquella chica la miraba fijamente, esperando su respuesta.

- ¿Te han dicho que eres pésima proponiendo relaciones unnie? -Quiso bromear para aligerar un poco la tensión, lográndolo viendo la sonrisa de su mayor, quien suspiró.

- Supongo que esperabas que te lo pidiera en un puente a la luz de la luna, o tal vez en una cena romántica como muestran en las películas... -Bromeó de vuelta aún estando casi encima de su acompañante.

- No necesariamente. Pero sí era preferible no mientras soy acorralada en un árbol de un parque después de que tuvieras un ataque de celos por Jeongin. -Esto pareció ofender a la más alta, quien alzó sus cejas junto a su boca entreabierta, como buscando algo con qué refutar aquello.

- No tuve un ataque de celos... 

- ¿Ah no? -Se permitió besar fugazmente a la universitaria.

- No. -Esta vez con su ceño fruncido, el cual, Im besó alcanzándola gracias a colocarse sobre la punta de sus zapatos. - ¿Estás besándome y desviando el tema para no responder mi pregunta?

- Creí que ya la había respondido. 

- ¿Uh? ¿Cuándo? -Esta vez parecía más confusa.

- Ahora. -Se adelantó a ella abrazando su cuello hasta acercarla lo suficiente para tener ambos rostros lo suficientemente cerca para sentir la respiración de la otra. Por inercia, su unnie colocó ambas manos sobre sus caderas, impidiendo que cayera hacia adelante consigo. - Sí acepto ser tu novia Yerim unnie. -Admitió finalmente con una sonrisa. - Ya te estabas tardando. -Añadió antes de besar a la nombrada, ninguna de ellas evitó las risillas entre medio de su encuentro, y le dio un toque dulce.

Con alegría, Choi levantó unos centímetros del suelo a su, ahora, novia. La risa de Im no se hizo esperar y chocó con el mentón de la más alta, avergonzada por estar en público y demostrarse afecto con ella. La bajó y miró con la misma dulzura que antes, cosa que volvió a tomar por sorpresa a la pequeña, quien desvió los ojos de su rango visual al encontrarse con el de la mayor.

- ¿Sucede algo? -La acercó pegando su dedo índice y pulgar a su mentón.

- Solo que me avergüenza cuando me miras así...

- ¿Así como? -Parecía divertida por ver como se avergonzaba, y claro que no había pasado por alto por la chica de cabellera rubia, pero lo dejaba pasar, porque era ella.

- Como si estuvieras enamorada de mí. -Murmuró volviendo a abrazarla, para ocultar su rostro sonrojado. ¿Era posible? ¿Era posible enamorarse en menos de un año como lo había hecho por su menor?

- Tal vez lo estoy... -Admitió en un susurro cerca del oído de Im, quien se sorprendió por la respuesta, no la veía venir. - Ahora tengo que trabajar, por mucho que quiera pasar tiempo con mi novia ahora. -Sintió los brazos de la bajita se estrecharon más contra ella, haciéndola reír. - De hecho, ahora estaba de camino a la disquería...