Ilegal

Epílogo ❤️🖤

Cuatro años después...

Davis

Los senos de Val están expuestos fuera del traje color crema que escogió para este día especial. Ella quería que fuese una sorpresa, pero no pude aguantar en ver su hermosura y timidez florecer juntas. Nuestra relación ha crecido en los últimos años, no es perfecta, pero para nosotros el arduo trabajo que hemos realizado para mantenerla es lo único que importa.
—Davis, tenemos que regresar a la fiesta. Todos deben estar esperándonos. —sus mejillas se sonrojan como normalmente lo hace e intenta acomodar nuevamente su traje.
—Todos nos conocen muy bien, ángel. Además, que otro tipo de bizcocho comeremos. Es demasiada azúcar, por que crees que te saque de la fiesta. Hemos probado dos y todavía falta el de Nia y Ash.
¿Quién carajos realiza tres bodas a la misma vez? —expreso acomodando mi ropa para verme presentable.
—El amor, te lleva hacer locuras. —ella responde mirándose en el espejo del baño.
—Ash y Nia los entiendo. Ella está a punto de dar a luz así que Ash tenía que hacer algo. James y Leo están por terminar los documentos de la adopción así que entiendo que deseen darle a la niña una familia completa. Ahora, ¿por qué diablos Rafael y Laura tienen que casarse nuevamente? —digo mirándola fijamente deslizando un lápiz labial color neutral.
—¿Intentas decirme algo? —su pregunta es exactamente lo que esperaba y me da la oportunidad de expresar lo que llevo guardando desde hace un tiempo.
—Sofía y Roman están viviendo juntos desde hace un año. Te graduaste hace unos meses como psicóloga y terapista, aunque sigues cogiendo otros cursos. Alejandro ya tiene quince años y a pesar de su discapacidad es un joven extremadamente independiente. Siempre vivirá con nosotros, pero él no puede seguir siendo el pretexto para que lleves mi apellido. —cada una de mis palabras la sorprenden y noto como los dedos de su mano derecha juega con la sortija de diamantes que le di luego de la muerte de Liam.
—Que tal si esperamos a que el día especial de nuestros amigos termine y luego volvemos a esta conversación. —contesta agarrando sutilmente mi rostro entre sus manos llevando sus labios a rozar los míos y de ahí termina nuestra conversación.

Regresamos a nuestro hogar alrededor de las dos de la madrugada. Luego de procurarnos de que Alejandro está en su cuarto descansando, mi ángel me tiene pegado a la pared en cristal de la ducha. Acariciando mi cuerpo y deseándome nuevamente nuestros ojos se conectan y su dulce voz me informa de sus planes.
—Sábado, dos de enero.
—¿A qué te refieres? —pregunto sin entender.
—Me refiero a que en dos semanas seré, Valeria Johnson. —ella me anuncia con una sonrisa gigantesca en su rostro.
—Ángel... Dios. ¿Hablas en serio? —digo besando todo su rostro hasta llegar a la piel delicada de su cuello.

El tener a mi ángel como mi esposa será una de las bendiciones más grandes en mi vida. Luego de la muerte de Cass nunca pensé que algún día pudiera tener mi propia familia. Mi hermano marcó nuestras vidas para siempre. Nos separó en ocasiones, pero al final su muerte fue lo necesario para alejar los demonios que nos persiguieron por años. Aveces tenemos tropiezos al recordar, pero seguimos recibiendo terapias individuales y como pareja. Así que aquí estamos inseparables luego de perder muchas cosas en nuestras vidas, solo nos necesitamos uno al otro para saber que aveces los secretos del pasado son los que nos guiarán hacia el futuro.

Dos semanas después...

Valeria

Llevo gritando a todo pulmón durante el juego de la serie final entre los Marineros y las Medias Rojas. Davis se encuentra en la lomita listo para comenzar su primer lanzamiento. Lo veo todas las semanas jugar y todavía la emoción que siento al verlo me llena el estómago de mariposas alegres. Hoy es un día especial para él y como siempre todos nuestros amigos están presentes para animarlo. A mi lado está Alejandro quien con Sebastián y Brett ya se han comido media docena de hot dogs y todavía no ha comenzado el juego. Sofía no ha parado de gritar cargando un cartel declarando su amor al jugador de segunda base. Rafael y Laura hablan con Aaron sobre negocios. Detrás de mi Egor juega con Valor mientras que Ash calma la histeria de Nia luego de que ella se comiera dos donas azucaradas. Y a mi otro lado se encuentra Zack, el cual hace solo unas semanas ha conseguido entrar a la prestigiosa escuela de béisbol aquí en Seattle.

Mi vida ha dado un giro desde que conocí a todas estas personas a quienes hoy en día considero mi familia. Gracias a ellos he tenido la oportunidad de crecer y valorarme a mi misma. Los tropiezos, las tragedias, aprendí de cada una de ellas. Todavía lloro, me entristezco y hasta sufro de depresiones y ansiedad, pero trato de no dejar que tomen control de mi vida.
Regreso mis pensamientos al presente y grito el nombre de mi pelotero favorito. Inmediatamente antes de comenzar una nueva entrada, el océano azul de sus ojos penetra los míos y la por siempre inevitable conexión que nos lleva al deseo y a la adición de ambos, la siento dentro y fuera de mi cuerpo. Con una sonrisa en mi rostro le señalo la camisa de los Marineros que llevo puesta y me giro para que él note el arreglo que Nia y yo le hicimos para este día especial. En letras mayúsculas negras la camisa lee, Valeria Johnson. Es la primera vez que utilizo mi ahora nombre luego de nuestra boda hace solo dos días. Giro mi cuerpo nuevamente y su sonrisa lo dice todo, la felicidad que ambos sentimos estoy segura los más de diez mil espectadores en el parque han sido testigo de la misma.
Quien iba a pensar, que la persona que ha traído los peores momentos en mi vida también se ha encargado en darme los más felices. Liam trajo la mayor parte de las adversidades a nuestro camino, pero Davis se encargó de traer la perseverancia, y esto es amor.

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Mil gracias a todos por su enorme apoyo a la historia de Val y Davis.

Síganme con mi nueva historia,
Cuidarte el Alma