﹫Lechugobich it's back. ¡! ─‣ 𝗚 𝗛 𝗔 𝗦 𝗧 𝗟 𝗬
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┃ ¿Te gusta creer en las fantasías de
┋ criaturas mágicas que viven entre
┋ nosotros o eres un hu...
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Lee Felix nunca había visto a un hombre más hermoso que el alto, y eso que el pecoso había visto hombres hermosos. Pero no había comparación con ese pelinegro de mirada profunda.
Era alto y esbelto, hombros anchos y piel muy clara. Tanto sus ojos como sus cabellos largos eran de un negro profundo que le daba un toque sensual y misterioso. Varios lunares destacaban en su nivea piel; aunque el pequeño que tenía bajo el ojo izquierdo llamó más su atención.
Se sentía mareado e hipnotizado por la belleza del hombre ¿Acaso era real? ¿Cómo alguien podía ser tan divino?
Aunque el pelinegro no era indiferente al pecoso. Sentía la misma atracción y encanto por el menor. Un simple mortal no podría cargar tanta belleza ¿o sí?
Se sentía confundido, no entendía como era que podía sentir una atracción tan grande por el desconocido. Simplemente su condición no se lo permitía.
─ ¡Lee Felix! ─ Jisung le propinó un zape en la nuca de su amigo, porque después de tres llamados ¡Lee le seguía ignorando!
El llamado obtuvo la atención de las otras cuatro personas en la habitación, haciendo que Jisung ríera avergonzado con un suave sonrojo. Los demás simplemente volvieron a ignorarlo y siguieron con lo suyo.
─ ¡¿Qué te pasa!? ─ Sobo en la parte afectada mientras giraba hacia Han.
─ Te estaba llamando y tú me ignoras. ─ Abrazó a Felix mientras hacía un mohin.
─ No te ignoro. ─ Acarició los cabellos de Jisung suavemente. ─ ¿Qué querías?
─ ¿No crees que Minho-hyung tiene algo con ese tipo? ─ Miró disimuladamente al rubio que aún tenía su mano sobre la cintura de Lee.
─ Uhm... sospechoso. ─ Felix analizó la misma escena que su amigo, mientras posaba su índice sobre su labio inferior. - No sabía que hyung se juntaba con bandidos.
─ No somos bandidos, niño bobo. ─ Los menores se asustaron cuando el pelinegro les corrigió de la nada ¿No habían susurrando acaso?
─ ¿A quién le dices niño bobo? ─ Jisung se levantó de su asiento, con su pecho inflamado buscando parecer amenazante, nadie se metía con su Lixie.
Pero su valentía se esfumó -aunque nunca existió en verdad- cuando el alto comenzó que caminar en su dirección con un aura tenebrosa. Inconscientemente Jisung se encogió en su lugar.
Justo en el momento en el que el pelinegro parecía querer decir algo Minho apareció con el ceño fruncido, poniendo una mano sobre el hombro del tipo desconocido.
A veces no creía que tuvieran el doble de su edad. Llegaban a ser tan infantiles y se ofendían tan fácilmente. Para ellos madurar era de frutas.
