NUNCA MÁS - DEKUKATSU

CAPÍTULO 4 : MARCA (PARTE 3)

Deku fue a visitar a Katsuki con un ramo de rosas en manos, lo había estado haciendo desde que decidió cortejarlo, debía lograr enamorarlo cueste lo que cueste.

—Kacchan...— llamó el pecoso, el contrario no hacía nada más que ignorarlo— ¿Como estuvo tu día?— preguntó, según internet la base de una buena relación era la comunicación.

—Estamos en el mismo salón y en la misma academia de héroes ¿Por qué haces preguntas tan estúpidas?—preguntó con notoria molestia— Ya estuviste demasiado tiempo aquí, ahora lárgate.

—Pero llegué hace diez minutos...— dijo el pecoso.

—¿Acaso un compañero sexual necesita estar mas tiempo del indicado? No estoy en celo así que no te necesito...

Al escuchar eso Izuku nuevamente sintió un fuerte dolor en el pecho, este dolor ya no era nada normal, había ido al hospital a causa de esto y le dijeron que era provocado por el rechazo de su pareja, ambos estaban vinculados, pero el único enamorado era Izuku y eso ocasionaba grandes problemas.

—Kacchan... Me gustas mucho...— dijo el pecoso un poco cabizbajo.

—Deja de repetir lo mismo — pidió con molestia —Eres molesto...

Midoriya se encontraba muy triste y empezaba a dudar si podría cumplir su cometido.

(...)

Los meses fueron pasando y las únicas veces que Deku sentía una cercanía con el rubio era cuando este estaba en celo, pero, cuando regresaba a sus cinco sentidos volvía a recibir su rechazo, a causa de esto Deku no se veía bien, su piel estaba pálida y a pesar de que diariamente entrenaba, sentía mucho cansancio con solo mover un músculo, su madre se preocupaba constantemente de él, pero este evitaba el tema con un "estoy bien" no quería preocupar a nadie.

—Kacchan te amo...— volvió a confesarse, ya había perdido la cuenta de cuantas veces lo había hecho— Por favor aceptame...— se encontraba desesperado, estaban cerca de cumplir once meses del año acordado y aún no lograba que el rubio lo mirara como su futura pareja.

—Ya te dije que no...— a Katsuki se le había hecho una costumbre rechazarlo, ya no le sorprendía lo que este dijera.

—Por favor...— volvió a pedir, ya era común para él sentir tanto dolor— Quiereme...— eso último lo murmuró mientras se ponía de pie— Me iré por hoy, vendré mañana...

Katsuki ni siquiera le respondió y ante lo dicho Izuku se marchó. Al llegar a casa se desplomó en el suelo, su madre al verlo se alarmó pero al igual que siempre, Izuku dejó de lado ese problema como si nada hubiera pasado.

—Hijo...— llamó Inko desde afuera de la habitación de Izuku, esta llevaba en manos una taza de té.

—Estoy bien mamá...— respondió desde adentro —No te preocupes, dormiré un rato y luego iré a cenar...— su madre dudó un poco ante lo dicho, pero decidió creer en él y se marchó.

Izuku sentía un fuerte ardor desde su estómago a su garganta, además su pecho y cabeza le dolían de sobremanera.

—¿Podre hacerlo?— se preguntó — ¿Kacchan me amará?— quería creer que si podía lograrlo, pero, con sinceridad dudaba que eso fuera a pasar— Te amo mucho Kacchan...

(...)

Nuevamente estaba frente a Katsuki quien le lanzaba una mirada indiferente, no sabía que mas hacer para conquistarlo, cuanto mas recibiría su odio.

—Te traje chocolates picantes...— dijo Izuku dejando lo mencionado sobre la mesita de noche que Katsuki tenía en su habitación.

—Si solo es eso entonces vete...— respondió Katsuki mientras posaba su mirada sobre los dulces, todo lo que tuviera relación con la comida picante le encantaba, pero no quería que Deku lo viera comiéndose eso.