Aquel dia... [Dabideku]

CAPITULO 18

~~MAÑANITAS~~

—Papá ¿puedo ser un héroe?
—Claro que si. Todo lo que tu quieras ser lo podrás ser si te esfuerzas - el mayor tomo a su niño y lo alzó para cargarlo.
—¿aunque no tenga una quirk? - sus ojitos se habían humedecido un poquito. No quería llorar, por que siempre que lo hacía frente de su madre por la misma razón, ella igual resultaba contagiada con esa tristeza y lloraba. Y era lo que menos quería. Que sus padres llorara por el.
—Jajaja. Hijo, los quirk no existían antes y ya había héroes
Los ojos esmeraldas se iluminaron al escuchar a su padre.
—Pero recuerda. No todos los héroes llevan capa y no todos los que tienen capa seon héroes y mucho menos tienen las manos totalmente limpias.

***

—¿Izuku? - una mano sobre su hombro lo sacó de su trance. - ¿estas listo?
Dabi había entrado a su habitacion, ya todo estaba listo y sólo faltaba el.

—Si. Solo mmmm ¿cuál me pongo? - le mostró dos playeras que eran iguales si no fuera por que una las letras que decían "camiseta" estaban un poco inclinadas, mientras que la otra eran de color más oscuro.

—Tu gusto si es que es especial...

Podría decirse que mas que fiesta parecía una pequeña reunión familiar. Habían adornado con pocos globos y cerpetinas de colores.
El cumpleañero no quería nada estrabagante y menos que se esforzaron tanto por el. Más por insistencia de su madre se coloco un pequeño letrero con las palabras : Felicidades Izuku

Ya todo estaba listo y aunque pensaba que igual que todos las veces anteriores (a excepción de que estaba Dabi) volverían a ser solo ellos.
Mas para su sorpresa el timbre sonó y fue el quien atendió.

—¡FELICIDADES! - al abrir Izuku se encontró con los Bakugo, que alegres abrazaron al menor. Bueno, solo los mayores ya que Katsuki solo estaba atrás de ellos con su típica cara enojada.

—Awww, Tía Mitsuki y Tío Masaru. Me alegra que vinieran. Muchas gracias. - Izuku recibió el abrazo y los dejo entrar, cerrando la puerta tras de Katsuki, que solo resoplo.

—¿Quien es? - Dabi salió al pasillo y vio que para su desagrado se encontraba el rubio explosivo, una copia de él pero en mujer y un hombre que transmitía una calma y tranquilidad muy ajena al diablo cenizo a su lado.

—Ellos son mi tia Mitsuki y Masaru. Son los padres de Katsuki - presentó el pecoso. Dabi solo saludo de mano.

—Oh, veo que eres un joven muy apuesto - Mitsuki se acercó a él y tomó entre sus manos las mejillas del pelirrojo para apretarlas - Tu debes de ser Dabi ¿no es asi? Inko me ha hablado de ti - dijo sonriente. Dabi Solo asintio

—Cariño, no seas así de brusca con el joven. Puede que no le guste - Masaru tomo de los hombros a su esposa.

—¡¿Ah?! PERO SI SOLO DIJE QUE ERA BONITO - contesto la rubia

—¡JA! ESA COSA ES HORRIBLE! - y ahí estaba el comentario del menor de los Bakugo.
Dabi solo rodó los ojos y abrió la boca para contestar, pero se sorprendió al ver como la rubia se acercó a su hijo y le dio un golpe en la cabeza.

—¡CALLATE MOCOSO GROSERO! ¡COSA HORRIBLE TU NIÑO GLOTEZCO! - y asi ambos rubios esperaron a gritarse.

Dabi reía divertido, ya había descubierto de donde había sacado su carácter el explosivo chico, mientras tanto Masaru e Izuku miraban con una sonrisa tímida la ecena, como si ya lo hubieran vivido mil veces y así era. Uno más que otro.