#4 Deepness

Capítulo 5

Capítulo 5

❈── ∗ ⋅Deepness⋅ ∗ ──❈

          Zeth conduce por alrededor de una hora, entramos a un camino muy largo en el bosque, Agatha se quedó dormida en la parte de atrás, ninguno ha dicho una sola palabra, yo me siento vacía, me siento estúpida e inútil, lágrimas silenciosas siguen cayendo por mis mejillas, mientras veo por la ventana.

         Debajo de una parte de la montaña hay un gran portón disfrazado con el musgo, se abre para nosotros y entramos, estaciona el auto, y me hace señas para que salga. Solo parece un garaje amplio y oscuro, hay una moto gris, una moto de nieve, creo que se llama así, y un automóvil.

         —Vamos a caminar, no podemos llegar en vehículo.

          Volteo a verlo, tiene a Agatha dormida sobre sus brazos como si no pesara absolutamente nada. Asiento, tomo mi bolso y lo sigo, atravesamos el frío bosque por un largo rato, en el silencio puedo sentir pisadas a nuestro alrededor, pero no veo que es. Si él está tranquilo, yo debo estarlo.

           Finalmente, llegamos a una cabaña, es pequeña. Agatha se despierta, así que la coloca en el suelo y se adelanta con sus bolsos a la cabaña.

          —¿Viviremos aquí, mami? —pregunta somnolienta, cuando me acerco a ella.

          —No lo sé —respondo.

          —Espero que sí, es hermoso y tan callado, no quiero irme.

            Sonríe levemente y camina hacia adentro.

            Tomo una respiración antes de entrar. Es un lugar pequeño, pero acogedor, tiene una chimenea, un mueble frente a ella y una lámpara. La cocina se ve desde aquí y hay por lo visto una sola habitación. Parece lista para nosotras.

           Me siento agotada, como si un peso invisible estuviese arrojándome contra el suelo, mis ojos se cierran con el dolor de tantas lágrimas, me arden, al igual que todo mi rostro. No puedo pensar claramente.

           —Agatha —dice Zeth entrando a la cabaña. Ella de inmediato voltea hacia él—, ¿quieres conocer mi casa?

            Mi hija voltea a mirarme y yo asiento, sé lo que hace, está llevándosela para dejarme descansar, volteo a verlo y asiento nuevamente agradeciéndole en silencio.

            Zeth se da media vuelta y sale sin decir nada más. Agatha se acerca, me abraza y luego corre tras él. Cierro la puerta de la entrada principal y camino hasta lo que parece ser una habitación, sin darle más vueltas a mi mente, solo me dejo caer en la cama y me duermo...

           El dolor palpita en mi cabeza cuando vuelvo a abrir mis ojos, no sé cuanto tiempo ha pasado, solo sé que aún es de noche. Me pongo de pie con cuidado y camino a la siguiente puerta que veo, en busca de un baño, si lo es.

           Arrastro mi bolso adentro y me doy una ducha, hay agua caliente, jabón y toallas. Dejo mi cabello húmedo, caer por mi espalda y me visto.

           Cuando salgo de nuevo a la habitación, la sensación de dolor vuelve a golpearme «¿dónde pudiese estar ahorita por ser tan débil?». Camino a la sala y me recuesto de la pared con los ojos cerrados.

          En segundos pude echar a la basura todo lo que han hecho por salvarme la vida, todo lo que hice por mi hija. Poco a poco me dejo caer hasta estar sentada en el suelo, abrazo mis rodillas contra mi pecho y recuesto mi cabeza en ellas, dejando que pocas lágrimas corran.