『¡Quiéreme Alfa Park! ChanSoo┊SeSoo』#1

XXIV

Todos miraban al abogado que se encontraba frente a ellos sosteniendo el testamento de Woo Sung, Kyung Soo se mantenía sentado junto a sus hermanos quien evitaban el contacto con su madre.

— Por este medio hago, publico y declaro que este documento es mi última voluntad y que estoy en plenas facultades, con edad legal, y que no actuó bajo presión o influencia indebida, y que comprendo completamente la naturaleza y el alcance de todo- —

— Si, ya sabemos eso, salte a la parte de mi hermanito. — Interrumpió Jun Myeon quien no se creía lo que su padre había hecho.

— Por la presente, le doy y concedo la custodia de mi hijo menor a su madre Lee Da Hee. — Hizo una pausa para dar la vuelta a la hoja. — Así mismo, concedo la tutela de Do Jeong Yeon a Do Jun Myeon, quien administrara su fideicomiso hasta que ella cumpla la mayoría de edad. —

Continúo leyendo el resto del testamento, donde no decía nada más que le importara a Jun, quien había dejado de escuchar después de lo que le importaba, una vez terminaron, finalmente se acercó a hablar con su madre.

— Dae Hee. — Se arrodillo frente a ella agachando la mirada. — Por favor, te lo suplico, no te lleves a mi hermano. — Sabia bien que ella no se quedaría en Corea, pues tenía toda su vida en Canadá, no la pensaba abandonar solo porque el omega deseaba quedarse.

— Puedes venir con nosotros, sabes que nunca te daría la espalda. — Negó con la cabeza al instante.

— A papá no le habría gustado que me fuera, este es su sueño... Nuestro sueño, solo déjame estar con Kyung Soo, no hay nadie que lo cuide mejor que yo. — Las lágrimas pronto se hicieron presentes, no podía pedirlo a él también, no era que no quisiera a Jeong Yeon, más bien era lo independiente que es ella, no lo necesitaba más que para lo básico, sin embargo, no podía asegurar que su madre lo cuidaría de la misma forma que Jun Myeon lo haría.

— Lo siento, pero no dejare a Kyung Soo, el estará mejor conmigo. — Se arrodillo junto a él ayudándolo a secar sus lágrimas. — Podrás ir a verlo cuando quieras, lo llamaras las veces que necesites, pero por favor entiende, que el necesita a su madre. —

— No. — Paso su mano por su rostro. — Peleare por su tutela, así sé que me quede sin un solo won, Kyung Soo se quedara conmigo. — De inmediato se puso de pie para encerrarse en el cuarto y cerrar la puerta detrás suya.

Jeong Yeon se acercó a la mujer con una sonrisa triste, la omega dejo su bolsa a un lado para darle un abrazo.

— No culpes a Jun Myeon... Solo está preocupado por Soo... Tú sabes que fue muy difícil para el cuándo te fuiste. — La mujer asintió con la cabeza acariciando su cabello.

— Lo sé, pero tú sabes porque lo hice. —

— Si, papá nunca nos hizo odiarte... Ya sabes, él sabía que ibas detrás de tu sueño y al fin lo lograste, al igual que nosotros. — Ladeo su rostro regalándole una sonrisa.

— Eres una gran mujer... Tal como Woo Sung lo dijo. — Hizo una pausa para sacar su celular y darle su número. — Vendré a hablar con tu hermano en estos días, primero nos mudaremos a unos departamentos cercanos, en un par de meses nos iremos a Canadá. —

— Hmp... Entonces... Nos estaremos viendo. —

— Si, te llamare para poder platicar uno de estos días. — Asintió con la cabeza repetidas ocasiones ansiosa de poder hablar con su madre.

— Conduce con cuidado. —

(...)

Encerrado en su cuarto, Jun Myeon buscaba una forma de tener la tutela de su hermano, sin embargo, entre más buscaba más costoso era, no tenía el suficiente dinero, se iría a la banca rota antes de poder hacer siquiera algo, además de él ¿Quién más estaría devastado con su partida? Fue ahí cuando le vino a la cabeza.