C2. Westfield.

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-Hola.-saludo en voz baja.-Eh, quisiera comprar un boleto para el vuelo a Nueva Jersey...

-El acceso al vuelo se cerró hace diez minutos.-responde.-Si quiere un boleto entonces tendrá que esperar hasta dentro de cuatro horas que es cuando habrá otro vuelo programado...

-Pero es que me urge.-susurro.-Tengo una reunión importante y...es de vida o muerte, de verdad...

-Igual que todas las personas que hay aquí.-anuncia sin más.-Siempre es de vida o muerte; siempre es urgente para todo el mundo pero no hay más acceso al vuelo de Nueva Jersey...

-Señorita, por favor.-murmuro.

-¿Qué no escuchó que...?-sus palabras cesan en el momento en el que sus ojos se encuentran con los míos.-¡¿Danna?!

-No, por favor.-suplico.-Baje la voz, por favor...se lo suplico por lo que más quiera...-inquiero a toda prisa. Dejo salir el aire de mis pulmones y niego lentamente.-Supongo que tendré que volver en cuatro horas...

-Puedo hacer una excepción por ti.-dice de inmediato.-El vuelo está cerrado pero el avión sigue en la pista. Puedo hacer que esperen por ti...los asientos ni siquiera están totalmente cubiertos así que...-frunzo mis cejas.

-¿De verdad haría eso por mi...?-cuestiono en voz baja.-Dios, te lo agradeceré toda la vida...

-Bueno... ¿pero podrías darme un autógrafo...?-susurra.-Verás...la hermana de mi novio es una gran fanática tuya; se sabe todas tus canciones y de hecho...estaba pensando en comprarle un boleto para tu concierto como regalo de cumpleaños pero creo que si me dieses un autógrafo tal vez eso podría funcionar para que me quiera por lo menos un poco.-suspira.-O para que deje de odiarme, quiero decir... ¿podrías...?

-Ah...si.-asiento.-Claro. ¿Cómo se llama la hermana de tu novio...?

-Helen.-anuncia.-¡Gracias, Danna!-exclama mientras extiende hacia mí un trozo de papel y un bolígrafo.

"Con todo mi amor para Helen; Danna :)x"

Plasmo mi firma de inmediato y se lo devuelvo.-Por favor no digas mi nombre.-murmuro acomodando mi gorra de nueva cuenta.-Y por favor...necesito que me hagas un favor y te prometo que te lo agradeceré toda la vida...

-El que quieras...

-No estuve aquí...no me has visto para nada...

Ella se ríe.-Entiendo...-anuncia y un segundo después me tiende un ticket con destino a Nueva Jersey.-Cortesía de la casa...-agrega sin perder la sonrisa de sus labios.

-Gracias...

(...)

Deslizo mi dedo por la pantalla táctil de mi teléfono y dejo salir el aire de mis pulmones mientras paso cada una de las fotografías. Mamá. Papá. Aarón. El abuelo. La abuela.

Y entonces mis ojos se llenan de lágrimas porque sé que cuando llegue a casa ella no estará ahí. No estará sentada en el pequeño porche leyendo su libro favorito y bebiendo café. No estará para decirme que he crecido mucho desde la última vez que nos vimos y tampoco estará para contarme que me vio en el televisor charlando con Jimmy Fallon como si hubiesemos sido viejos amigos o haciendo el ridículo en programas de televisión matutinos. Me acomodo los lentes oscuros procurando que nadie me reconozca y apago la pantalla de mi teléfono una vez más.

Alrededor de cinco horas después cuando el avión a aterrizado finalmente agradezco mentalmente por eso y asegurándome de tener todas mis pertenencias; me pongo de pie. La gorra que cubre mi cabeza cae sobre el asiento y un grito de excitación lo secunda. Llevo mi mirada a la niña de por lo menos catorce años que me mira con los ojos bien abiertos y mi corazón se acelera de inmediato.

STARVING #1 (Saga STARVING)|Christopher Vélez.(Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora