STARVING #1 (Saga STARVING)|Christopher Vélez.(Completa)

C3. Lo que se ve no se juzga.

—Buenos días—saludo en voz baja cuando entro en el comedor de la casa. Papá me lanza una sonrisa que me parece bastante surreal pero vamos… a puesto lo que sea que él tampoco puede terminarse de creer que estoy aquí. Porque yo tampoco lo creo y mientras más lo pienso más irreal parece.

—Buenos días, amor.—responde antes de llevar su taza de café a sus labios.—¿Cómo dormiste…?

—Excelente.—miento.—¿En dónde está mamá?—cuestiono apoyando mis manos en el respaldo de la silla. Sus ojos me miran otra vez.

—En la cocina.

—Ya vuelvo.—decido antes de caminar con pasos lentos hasta la cocina.

—Buenos días.—saluda mamá apenas me mira que entro en el lugar. Tomo un pan tostado de la de la tostadora  le doy una pequeña mordida.

—Buenos días.—responde volviendo a masticar lentamente.—¿Dormiste bien?—cuestiona.—Anoche pasé por tu habitación para darte las buenas noches pero ya estabas dormida…—asiento.

—Estaba cansada.—inquiero encogiéndome de hombros.

—Entiendo.—susurra.—¿Tienes planes para hoy…?

Me quedo en silencio un segundo y luego dejo salir el aire de mis pulmones.—Si.—asiento.—¡Iré al cementerio!

—¿Qué?

—Quiero visitar la tumba de la abuela. Así que aprovecharé para ir al cementerio, compraré flores o algo así.—hago una pausa.—¿Ustedes…? ¿Qué planes tienen para hoy?

—Pasaremos por la iglesia. Hoy es el aniversario luctuoso del difunto marido de Yenny.—anuncia sin más. Mi corazón deja de latir un segundo mientras mi cabeza trata de comprender lo que acaba de salir de sus labios pero no digo nada. Me mantengo en silencio y asiento lentamente.—¿Por qué no vienes con nosotros…?—propone.

—No.—niego de inmediato tratando de cambiar de tema tan rápido como me es posible.—Ustedes vayan; los veré por la tarde…

—Dan…—comienza.

—Mamá…de verdad…

Ella me tiende una taza de porcelana con lo que creo que es café y la tomo entre mis manos de mediato. Inspiro con fuerza y lo tomo para darle un pequeño sorbo que me hace terminar de despertar por completo.

—No pretendo hacerte que hagas cosas que no quieres ¿sabes?—murmura lentamente sin apartar sus ojos de los míos.—Sé que eres grande, que tomas tus propias decisiones pero pensé que tal vez querrías hacer esto…después de todo la relación que Christopher y tú tuvieron…—niego firmemente y automáticamente las palabras cesan.

—Eso es cosa del pasado.—respondo sin más aunque todavía me puedo recordar a mí misma contemplando fijamente la fotografía que encontré la noche de ayer.—Y ya no tiene importancia porque yo no pertenezco a la vida de Christopher de la misma manera en la que él no pertenece a la mía…

—De acuerdo.—susurra finalmente.—Entonces vamos, hora de desayunar…

—¿En dónde está Aarón, por cierto?—pregunto.—Pasé por su habitación pero la cama estaba hecha y sé que he pasado un tiempo fuera pero por lo que puedo recordar él no es el tipo de persona que se despierta temprano…es bastante holgazán, de hecho…

Mamá se ríe.—Fue a un partido de fútbol.
—¿En serio?—asiente.

—El equipo local de Westfield tenía un partido importante hoy en el estadio así que él fue porque sus amigos juegan ahí…—asiento lentamente.