C7. Ser una súper estrella pop es una mierda.

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Inspiro con fuerza y camino lentamente por el pequeño sendero empedrado del mirador. Detengo mis pasos de golpe cuando veo el cuerpo de Danna tendido sobre una manta encima del césped. Su brazo descansa encima de su rostro pero sus piernas se mueven lentamente dándome una pequeña señal de que está despierta.

—¿Danna…?—cuestiono en voz baja. El movimiento ligero de sus piernas cesa de inmediato pero no se mueve ni un poco.—¿Qué haces aquí…?

—Ahora no, Christopher. Por favor.—murmura pero no deshace su posición. Me quedo en silencio contemplándola un momento y entonces las palabras de Richard vuelven a mi cabeza de golpe.

—¿Se puede saber qué te pasa?

—¿Te importaría dejarme sola?—pregunta.—Realmente no tengo ganas de hablar sobre eso y tampoco tengo ganas de discutir ni nada que se le parezca…—dejo salir un pequeño suspiro y niego lentamente.

—No vine a pelear…

—¿Cómo sabías que estaba aquí…?

—Te lo dije ayer; este era tu lugar favorito cuando vivías en Westfield…solías venir siempre cuando llegabas al punto en el que ya no sabías que hacer con tu vida…—Danna se queda en silencio un largo momento antes de  deshacer su posición e incorporarse. Sus ojos –rojizos- me miran un segundo antes de volver a apartar la mirada.—¿Qué te pasa…?

—Sé por qué estás aquí…—anuncia.

—¿Ah, sí?—cuestiono enarcando una de mis cejas.—¿Y por qué se supone que estoy aquí…?

—Ni estoy loca ni soy bipolar por si eso es lo que te estás preguntando...—responde apartando la mirada.

Meto mis manos dentro de los bolsillos de mi campera e inspiro con fuerza.—No dije que lo fueras; no pongas palabras en mi boca que no he dicho. Ni tampoco lo estoy pensando…

—Vamos, Christopher…no tienes que fingir conmigo…

Chasqueo la lengua y niego lentamente.—¿Por qué si te molesta tanto que ella esté diciendo toda esta mierda sobre ti no haces nada para ponerle un alto…?—me atrevo a preguntar.—¿Por qué te dejas pisotear así…? ¿Qué ganas mintiendo?

—Es una buena pregunta…—responde.—Dios ¿es que como puedo ser tan jodidamente estúpida?—se cuestiona a sí misma.—Era obvio que algo planeaba Marion cuando me dijo que no podía dejar que nadie supiera que estaba aquí. Por eso me pidió que no dejase que me fotografiaran... ¡Porque Marion tenía su jodido plan en marcha! Una vez más Marion me estaba dejando fuera y no hice nada: ni siquiera lo noté…

—¿No sabías nada?—cuestiono y cuando los ojos de Danna me miran de nueva cuenta inspiro con fuerza.—De acuerdo, creo que tengo que replantear mi pregunta. ¿Por qué no sabías nada?

—Aunque no me lo creas no tengo control de todo lo que pasa en mi vida, Christopher.—responde en voz baja.—De hecho se podría decir que solo tengo un treinta por ciento del control de mi vida…de todo lo demás se encargan Charlie y Marion…

—¡Pues son unos verdaderos hijos de puta!—decido sin poner contenerme.

—Esta es la primera cosa en la que coincidimos desde que nos volvimos a ver.—anuncia.

—¿Sabes? Nunca voy a entender cuál es la necesidad de tirar mierda sobre una persona… ¿Qué se supone que Marion gana diciéndole al mundo entero que estás en una jodida clínica de salud mental?

—Entonces si viste la nota…—murmura en medio de un largo suspiro cargado de frustración.

—No, realmente no.—niego.—Pero Richard me lo dijo…su madre vio alguna mierda como Jimmy Fallon o algo así…

STARVING #1 (Saga STARVING)|Christopher Vélez.(Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora