Han pasado un año y medio desde que Steven Universe decidió dejar Beach City para embarcar su viaje alrededor del mundo. han sido años calmados sin ningún tipo de problema, al menos hasta la llegada de Louis, un Joven Desconocido que también es Mita...
Al final de aquel largo pasillo se encontraba una gran plataforma donde todos visualizaron la nave con forma de piernas. Louis se río al ver el diseño, supuso que todas las naves de las diamantes era de ese modo; extravagantes. Una vez se acercaron a la nave de comando lograron ver claramente lo grande que era.
—Toda Suya — Dijo White viendo con nostalgia la nave de Pink, pues tenía bastante tiempo de no ser usada — Si creen tener problemas para su manejo puedo llamar a algún experto que...
—No se preocupe Diamante, esto es pan comido para mí, Peridot, la gema más inteligente de las Crystal Gems — Dijo Peridot con aires de grandeza.
—Entonces no tenemos de que preocuparnos — Dijo White sonriendo — De acuerdo, todo está listo para el viaje. El comunicador de Pink está habilitado, solo deben presionar un botón y nosotras recibiremos cualquier mensaje.
—Gracias chicas — Dijo Steven viendo a las diamantes.
—Muchas... Muchas gracias — Dijo Louis acercándose también a las grandes gemas.
—No es nada Steven, Louis. Es un placer para nosotras poder ayudarlos — Dijo Blue calmadamente.
—Entonces... ¡Es la hora! — Las Crystal Gems ingresaron a la gran nave dispuestos a encontrar a Ametrina.
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Red Diamond caminaba por las hermosas llanuras de Enkel, justo a las afueras de Infales estaba un gigantesco Árbol de hojas Blancas, como si las hojas estuvieran cubiertas de nieve. Red siempre iba ahí cuando se sentía sola, pues aquel Árbol era el preferido de Mary. Su madera de color oscuro y su vegetación blanca hacían un contraste con todo aquel ambiente verde que lo rodeaba. Sin duda era un árbol maravilloso.
—Mary... ¿Cómo debo proceder? — Se preguntó la gran Gema.
Red sabía que dentro de poco era probable que volviera a ver a Louis y sus amigos. Por lo que sin haberse dado cuenta había puesto su planeta en peligro. No habían muchas opciones, pues a pesar de ser peligroso, en aquel sitio la diamante tenía la ventaja.
Red recordó aquel día con algo de nostalgia. Justo cuando la noticia de que el blanco Ametrina había sido destruido. Tuvo que fingir una falsa sonrisa, pues la intención de Red era capturarla, no destruirla. Cuando Red vio a Ametrina con vida casi saltó de la emoción, pues no lo creía, pero debía mantener las apariencias.
—¿Porque Ametrina? Si tan solo entendieras mis intenciones... — Red bajo de aquella colina dejando de lado el majestuoso árbol de Mary.
Bajando con firmeza vio a Perla que la esperaba pacientemente en la punta de la subida. La gema servicial hizo una seña de respeto, como siempre.
