Perdida en Hogwarts II

Capitulo 26

Miré a los chicos con preocupación, por un segundo sentí como mi corazón se me rompía por el dolor, por el dolor que tenía que sentir en ese momento entre elegirlos a ellos o salir corriendo detras del rubio. Busqué alguna mirada de complicidad, de comprensión hacia ese momento que yo estaba viviendo, pero la sorpresa se había apoderado de todos.

Harry- Decidida me dirigí hacia el chico de las gafas- ¿Por que? ¿Por que no me dejas a mi elegir con quien quiero estar? Que me va a hacer daño, pues vale, estoy acostumbrada a eso. Pero estoy harta, ¡harta!- La voz se me quebró y las lágrimas comenzaron a aparecer- De que siempre decidan sobre mi, de que otras personas vivan mi vida antes que yo misma. Si me voy a equivocar dejadme que me equivoque, pero por favor no me controleis mas, no podré seguir aguantandolo- Tomé aire ya que mi respiración se me había acelerado, una sensación de enfado y tristeza me había envuelto pero aún seguía buscando a alguien que me comprendiera.

Arme, ve con el tranquila, yo hablaré con ellos- La voz de Luna sonó, la busqué con la mirada y logré encontrarla al lado de Neville, el sentimiento de culpa por haberles estropeado la trarde tambien llegó a mi.

Yo..., lo siento- Con lágrimas ya cayendo por mis mejillas eso fue lo único que pude decir para despues salir corriendo hacia la dirección de Draco. No sabía donde se había metido pero un lugar apareció en mi mente casi sin necesidad de pensar. Fui corriendo a la torre de astronomía y justo al entrar pude ver a mi chico asomado al balcón con aún los ojos llenos de lagrimas- Draco- Dije su nombre casi en un susurro y me acerqué lentamente a el para ponerle una mano sobre su hombro. Cuando me sintió se giró, pude ver sus ojos rojos por el llanto, no lo aguantaba, no queria verle de esa manera, asi que sin pensarmelo me abalancé sobre el para abrazarle, pero este suavemente me apartó- ¿Que...que pasa?

El tiene razón, y yo no quiero hacerte daño- Su voz sonó ronca, dolida, igual que la mía, pero sus palabras me dolieron aún más.

Draco, no me hagas esto, no puedo, no puedes hacerme esto, me da igual, me da igual lo que todos digan, me da igual si tienen razón, si no la tienen, todo me da igual, solo te quiero a ti, y si eso significa que voy a sufrir, que me vas a hacer daño, no quiero otra cosa en mi vida- Comencé a llorar delante de él como nunca había llorado pero no me importaba, no me importaba que me viera vulnerable sólo quería que estuviera a mi lado para siempre.

Pero- Lágrimas volvieron a salir de sus ojos para acompañar a las mías- Yo..., yo... no debemos estar juntos.

Dime porque, dime porque crees que no, dame unas razones claras y me aparté de tu lado para siempre, ni si quiera te volveré a mirar- Respiré hondo dispuesta a escuchar sus razones.